Una odisea llevar apoyos a damnificados de 38 comunidades afectadas por desbordamiento
Rafael Meléndez Terán
Minatitlán, Ver.
Dos horas antes del mediodía ya estaban listos los víveres que se llevarían a pobladores de las comunidades que desde inicio de mes han permanecido bajo el agua por el desbordamiento del río Uxpanapa.
Del embarcadero de la panga Mezcalapa, en Minatitlán, salieron al menos 200 litros de agua, unos 200 kilos de despensas alimenticias y otro tanto igual de artículos de limpieza que, de manera oficial, entregaría la secretaria de Protección Civil (PC), Noemí Guzmán Lagunes, a los habitantes de la comunidad Antiguo Uxpana.
Después de entrar a la Boca de Uxpanapa, donde hace cruce con el Coatzacoalcos, Protección Civil hizo una parada en José Cardel, donde ya se habían adelantado los suministros de auxilio, ya eran las 10 y media.
Largo trayecto
Arrancó de nuevo la embarcación para internarse en la grandeza del Uxpanapa, afluente en el que habitan familias en casas dispersas, todas construidas en palafitos, aun a pesar de la lejanía y del daño, que año con año, les causan las inundaciones.
El estruendoso ruido provocado por el motor de la embarcación alteraba la tranquilidad del paisaje en el que el río, como espejo, dibuja el cielo azulado, sin nubes negras y sin lluvias.
-¿Porqué vivirá la gente en este lugar tan lejos?, preguntó uno de los tripulantes al observar una choza de palma, en la que no hay electricidad, agua potable ni las condiciones mínimas para poder llevar una vida digna. Nadie respondió nada.
A escasos 20 minutos para las 12 del día, la lancha cruzó La Concepción, comunidad rural de Minatitlán, en donde también hubo afectados, aunque la cercanía con Las Choapas no los dejó totalmente aislados, ya pasaban 40 minutos de la cita oficial con Guzmán Lagunes, mientras los responsables de los insumos se comunicaban por radio dando la ubicación. Todavía faltaba mucho para llegar al punto.
Naturaleza a plenitud
Para algunos, el largo trayecto sirvió para descansar y reponerse de las "friegas" que se han llevado en estos días de intenso trabajo, causado por los desbordamientos de ríos a razón de los impactos del Frente Frío 7 que interactuó con la Onda Tropical 36.
Otros, que por primera vez se aventuraban en estas tareas, prefirieron admirar la grandeza de la naturaleza, la vida que generan los ríos. Aquí es común observar aves parecidas a los flamingos, cuyo nombre ninguno conoce, volando, atravesando la rivera e internándose al agua a sacar algún pez para alimentarse.
El blanco plumaje de las garzas se destaca en el fondo verde de la vegetación, y mucho más cuando, asustadas, emprenden el vuelo por el ruido de la embarcación.
Se observan también reptiles trepados en las copas de los árboles, resguardándose de tanta agua. Nadie sabe si son venenosos pero "por las dudas" se retoma el camino justo en el centro del Uxpanapa. Ya dieron las 12 y no hay indicios de llegar a Antiguo Uxpana.
Para esta hora y teniendo enfrente las cajas, ya casi se memorizó el contenido de las despensas enviadas por Fondo de Desastres Naturales (Fonden): arroz y frijol precodido, café soluble, harina de maíz, leche en polvo, chilorio de cerdo, atún, barra de amaranto, chile jalapeño, sopa instantánea y chocolate en polvo, mismos que servirían para poder suministrar de alimentos a una familia pequeña por un día y medio, en caso de que se racionen meticulosamente las porciones.
Estos suministros fueron enviados por el Sistema Nacional de Protección Civil y autorizados por la Secretaría de Gobernación (Segob) en virtud de haberse establecido una declaratoria de emergencia. "Tiene como finalidad exclusiva el apoyo a la población afectada", se lee en las pequeñas cajas.
En el transcurso comenzó la lluvia moderada pero constante, misma que ya estaba pronosticada desde este miércoles y hasta el próximo sábado.
Reciben víveres
Finalmente los víveres llegaron poco antes de la una de la tarde a Antiguo Uxpana, ante la mirada espectante de los damnificados que obserbavan una a una las lanchas cargadas, como cuando se recibe a alguien querido a quien no se ha visto en mucho tiempo.
Para ese momento la titular de Secretaría de PC ya se había marchado, después de haber sido recibida con una comida consistente en nácaras fritas y caldo de camarón, como comúnmente hacen los pobladores cuando reciben beneficios, a candidatos y a funcionarios.
Después hizo la entrega simbólica con lo que se tenía a la mano a pobladores de Antiguo Uxpana, Tecuanapilla y San Jerónimo, dejando la instrucción de atender a todos los minatitlecos al coordinador regional de la dependencia, Guillermo Hernández Urbina.
Después de bajar todos los insumos, personal de PC en Minatitlán, al mando de Joel Montejo Hernández, se encargaron de hacer la entrega correspondiente.
"Nos vemos el año que viene", se despidieron después de recibir las despensas. "A lo mejor antes", gritó otro de los beneficiarios, mientras trataba de separar a unos perros que peleaban por el contenido de las cajas recién llegadas.
