Martín Cruz
Nanchital, Ver.
A pocos meses que concluya la actual administración y debido a que las finanzas en el Ayuntamiento no mejoran porque el gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares no termina de saldar el adeudo que heredó el ex gobernador Javier Duarte de Ochoa, se avizora un nuevo recorte en la plantilla de los trabajadores de confianza.
De acuerdo a fuentes extraoficiales, las autoridades analizan el último recorte con el propósito de estabilizar las finanzas y entregar buenas cuentas, mientras que en lo que va del año, la entidad municipal no ha recibido el recurso que no entregó la pasada administración estatal que encabezó el hoy recluso Javier Duarte, por lo que algunos empleados de confianza tendrán que ser sacrificados dejándolos nuevamente sin empleo.
A finales del año pasado, varios empleados de confianza fueron despedidos temporalmente para poder sobrellevar la crisis financiera que se presentaba en ese momento, no obstante, a más de seis meses los problemas económicos aún persisten, por ello corre el rumor que nuevamente llegará “la guillotina” a direcciones y en otras áreas, para así tener un ahorro importante que permitirá cubrir necesidades apremiantes a pocos meses de que concluya actividades esta administración.
Y es que tras los despidos en octubre y noviembre de 2016, a principios de este año, varios desempleados se acercaron para ser contratados nuevamente, pero tal parece que el procedimiento volverá a repetirse, por lo que en próximos días cada trabajador de confianza será llamado para notificarle que tendrá que tomar un descanso obligado y presentar su solitud de empleo hasta enero de 2018.
