ROMANA ORTEGA CRUZ
NANCHITAL, VER.
Gente corriendo en el estadio Francisco R Gómez, decenas de damas con sus atuendos deportivos, y un sol que brilló por escasas horas, tiempo necesario para que Zoila Balderas diera inicio a una de sus primeras y tantas actividades que tendrá como primera autoridad de Nanchital.
Era la inauguración del gimnasio, donde muchas damas y caballeros se presentaron para escuchar a la alcaldesa, quien ordenó que no faltara una mesa con un café y unos panes para que el que quisiera consumiera sin problema.
Muchos se sintieron como que si volvieran los tiempos del famoso Chico Balderas, quien en sus eventos encaminados al deporte, hacía que no faltara algo para degustar, para atender a los deportistas.
Y es que aunque la crisis económica está apretando al municipio, la alcaldesa buscó los medios para reactivar y darle mantenimiento al estadio, quien junto con un patronato de mujeres y con una aportación de no más de 20 mil pesos, lograron que el gimnasio se volviera funcionable y grato para los usuarios.
Otro edil en otros tiempos e incluso en estos, diría que fue una obra en la que invirtieron miles de pesos, pero ella la alcaldesa con sinceridad, prometió a todos los presentes, hacer rendir lo más que se pueda los ingresos municipales para beneficiar a todos y levantar al Nanchital que se quedó olvidado.
No paraban las mujeres que querían la foto con la hija de Chico, las que solo intentaron saludarla, las que le dieron las gracias por iniciar con el trabajo necesario que urge en Nanchital, por lo que “con poquito lo haremos bonito”.
