28 de Marzo de 2024

Entrega Senado máximo galardón a héroe veracruzano

AVC

 

Ciudad de México

En sesión solemne, el Senado de la República entregó la Medalla de Honor Belisario Domínguez 2016, post mortem, al ciudadano Gonzalo Rivas Cámara, conocido como “El Héroe de Chilpancingo”, por su heroísmo, responsabilidad y solidaridad en grado eminente, para sacrificar su vida y salvar la de otros.

El presidente de la Mesa Directiva, Pablo Escudero Morales entregó a Clitia del Socorro Cámara Murillo, madre del galardonado, la presea y diploma que acredita a Rivas Cámara como miembro de la Orden Mexicana de esta presea.

En esta sesión solemne participó, como testigo de honor, el titular del Ejecutivo Federal, Enrique Peña Nieto; acompañado en el presídium por el ministro Eduardo Medina Mora, en representación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación; el presidente de la Cámara de Diputados, Edmundo Javier Bolaños Aguilar; doña Clitia del Socorro Cámara Murillo; y el presidente del Senado.

A nombre del Senado de la República, la secretaria de la Comisión de la Medalla Belisario Domínguez, Sonia Mendoza Díaz, resaltó que el galardón se entrega a un mexicano que, en un acto de heroísmo y con la seguridad de perder la existencia, supo cumplir con el deber que le dictó su conciencia.

Aseguró que la asamblea honra la conducta que ha dado una lección irreprochable de amor a sus semejantes y de una valentía formidable, al ofrendar su vida para proteger la de otros. Gonzalo Rivas Cámara demostró ser un hombre íntegro al que la vida le colocó sobre los hombros “el colosal peso de decidir ponerse a salvo o salvar a los demás, a costa de perder la existencia”.

 

 

El condecorado se encontraba en su oficina en una gasolinera de Chilpancingo, el 12 de diciembre de 2011, cuando inició el fuego en una de las bombas despachadoras de gasolina, como resultado de un enfrentamiento entre policías y estudiantes.

 

De acuerdo con sus compañeros de trabajo: “mientras todos corrieron a ponerse a salvo, Gonzalo buscó un extinguidor para controlar el incendio”, impidiendo que se extendiera a los depósitos de gasolina, pero este acto le provocó quemaduras de tercer grado en el 80 por ciento de su cuerpo.