Enrique Burgos
Coatzacoalcos, ver.
Francisco Cruz Xoxo estaba trabajando en el techo de un inmueble con un taladro quitando unos tornillos, solo recuerda que de pronto recibió una descarga eléctrica, despertó en el hospital, fue cuando supo que había tenido un accidente.
El hecho se registró el pasado 12 de febrero a la 1 de la tarde en la colonia Santa Rosa de Coatzacoalcos, cinco meses después sigue recuperándose.
“Estaba yo fijando unos tornillos con un taladro, estaba acostado y de repente no recuerdo nada del accidente. Si había cables de alta tensión, pero pues aparentemente ya lo habíamos contemplado la altura de los cables”, aseguró.
Con solo 26 años, sufrió quemaduras en diferentes partes de su cuerpo, la corriente eléctrica salió por su pie derecho, extremidad que resultó más dañada, pues los cinco dedos se los tuvieron que amputar.
“Digamos fue aquí en el brazo, la espalda, la pierna izquierda, la pierna derecha no está quemada, solo simplemente fueron los dedos. Como fue alta tensión entonces ya no tenía salvación los dedos, por la alta tensión y electricidad quedaron secos”, manifestó.
Ahora Francisco Cruz busca contar con una prótesis para poder llevar una vida relativamente normal. La Fundación Te Queremos Ayudar para Niños Quemados, atendió el caso y espera que Francisco retome sus actividades al lado de su familia.
La organización pidió a quienes trabajen en techos a prevenir estos accidentes por electrocución y no hacerlo debajo de cables de alta tensión, pues las consecuencias pueden llegar a ser fatales.
“Es importante para nosotros que la prevención siga siendo la mejor herramienta para evitar accidentes por quemaduras y si son quemaduras eléctricas, las empresas deben de capacitar a su personal, empresas pequeñas o grandes, aquí lo importante es que las personas sepan los riesgos que tienen cuando trabajan en las alturas, albañiles, pintores”, apuntó la presidenta de la fundación Xóchitl Mortera Hernández.