Más de 60 familias, la mayoría de escasos recursos decidieron invadir el área cercana al malecón costero sobre la avenida Jirafas, se enfrentan no solo a frecuentes amenazas, también al riesgo de perderlo todo a causa de los factores climáticos.
YANDDERITH RODRIGUEZ
Coatzacoalcos
Don Germán, es padre de familia, tiene 3 hijos, uno de 8, 5 y 2 años de edad, el junto a su esposa, han buscado por más de 15 años oportunidades para obtener una vivienda, sin embargo la respuesta siempre fue negativa, por años invadieron viviendas abandonadas, donde posteriormente y como “por arte de magia”, aparecían sus dueños, que aun sin ocuparlas exigieron el desalojo, hoy en día son nido de maleantes y detonante de asaltos.
“Unirse a líderes, es un arma de doble filo”, comentó, ya que tras la supuesta ayuda, siempre han condiciones e intereses de por medio, tal y como le sucedió en la colonia Fidel Herrera, donde anteriormente se ubicaba, pero tras el desalojo de forma violenta, prefirió retirarse sin decir nada.
“ya había pagado bastantito dinero, pero como deje de dar un pago, porque uno de mis hijos se enfermó, simplemente me echaron a la calle, llegaron unos hombres con machetes y nos obligaron a salir de la casa, amenazándonos y rompiéndonos nuestras pocas cosas”, dijo.
Tras ese acto, prefirió no reclamar, pasar desapercibido y buscar otro lugar donde vivir, sin que tuvieran tantos problemas.
“LLEGAMOS PARA QUEDARNOS”
La invasión de un predio, es un acto ilegal, que en la ciudad de Coatzacoalcos, ocurre a menudo, sea por necesidad, desidia, ambición, lo cierto es que desafortunadamente centenares de familias no tienen oportunidades para adquirir una vivienda digna, lo que los orilla a realizar este tipo de acciones, que posteriormente terminan en pleitos o quizá en hechos violentos.
“Si nos han amenazado, tengo miedo por mi familia que son los que se quedan aquí en las mañanas, no pedimos nada a las autoridades, solo que nos dejen quedarnos aquí, no queremos pleitos ni nada, queremos oportunidades de vivienda”, dijo.
“SOMOS INVISIBLES PARA LAS AUTORIDADES”
La seguridad, en el lugar, no existe, por un lado el temor a enfrentarse a situaciones de violencia al intentar desalojarlos, por otro quedar en manos de delincuentes al no contar con ningún apoyo por parte de las autoridades.
“Como somos invasores, no nos ayudan en nada, no tenemos servicios de nada, agua, luz, menos seguridad, si pasan las patrullas, pero somos invisibles para ellos, y tienen toda la razón estamos invadiendo, pero saben que es por necesidad”, agregó.
Sin embargo no todo es color de rosa, el recurrir a la invasión de predios, trae consecuencias, y muy graves de no controlarse a tiempo, y es que unos meses de haber llegado el lugar, ya vivieron en carne propia, el estar localizados en un área vulnerable a los factores climáticos, tal es el caso de los frentes fríos, y es que las rachas de viento de más de 70 kilómetros por hora y las intensas lluvias provocaron graves daños en la zona, muchos lo perdieron todo, la mayoría de las viviendas presentaron estragos que llevaron a su reconstrucción.
“Los techos salieron volando por el aire, por más que les pusimos piedras o los amarramos, de nada sirvió y eso representa un gasto para nosotros, porque tenemos que volver a comprar el material, algunas casas ya están construidas de material, pero quienes no tenemos, la construimos de lo que nos sirva, de cartón, de lámina o de esos carteles que luego tiran”, dijo.
El frente frio numero 12 traerá vientos fuertes y lluvias, por lo que temen se repita la historia, ya que el vivir frente al malecón costero, a unos pasos de la playa de Coatzacoalcos, resulta peligroso, por lo que algunos optaran por retirarse “temporalmente”, mientras que los demás permanecerán bajo su propio riesgo ante el temor de que sean desalojados permanentemente del lugar.
