Las calles de la colonia Pensiones, dejaron de ser seguras para los peatones y vecinos del sector, no solo por la delincuencia, también por la falta de señales viales, las cuales son necesarias ante el incremento de accidentes de tránsito.
YANDDERITH RODRIGUEZ
Coatzacoalcos
En lo que va del año al menos tres accidentes de ´transito se han registrado sobre las calles principales de la colonia Pensiones. Sobre sus vías alternas solo percances que afortunadamente no han terminado en tragedia, sin embargo temen que esto suceda a raíz de que no son seguras para los peatones.
La mayoría presenta daños en el asfalto, baches enormes debido al paso del tiempo, otras más tienen reductores de velocidad, pero destruidos que no funcionan como tal, siendo la causa de constantes accidentes de tránsito.
La falta de luminarias alimenta la inseguridad en la zona, ya que cerca del área recreativa, la cual luce en buenas condiciones gracias al compromiso de habitantes de mantenerlo limpio, hay construcciones que quedaron abandonadas, siendo ocupados como basureros clandestinos, o área de citas de parejitas que merodean por el lugar, pero además el problema de plagas que es persistente.
DEJARON DE SER SEGURAS
Tanto las banquetas como las calles de la colonia Pensiones dejaron de ser seguras, por un lado la falta de reductores de velocidad, que hacen de la zona un atractivo para jovencitos quienes los fines de semana las utilizan como pista de carreras, y por otro la oscuridad en las noches, siendo rutas inseguras para los peatones.
“En las noches ya es peligroso andar por estas calles, muy pocas luminarias funcionan. Hace falta que las reparen porque cada vez que hay tormenta nos quedamos a oscuras”, dijo una de las vecinas del sector.
La vigilancia según los vecinos del lugar, desapareció junto con las promesas de mejorar en la colonia, la mayoría se ha tenido que adaptar, otros más a buscar la manera de hacer de sus casas un lugar seguro que evite el ingreso de los amantes de lo ajeno, siendo esto un problema sin resolver.
“Por más que pongamos protecciones en puertas y ventanas, el problema es el mismo, la falta de seguridad es lo que hace que sigamos padeciendo por la delincuencia”, dijo uno de los vecinos del sector.
Para el, invertir en la seguridad de su familia, lastima sus bolsillos, ya que en dos ocasiones, los amantes de lo ajeno han hecho de las suyas en su vivienda, hasta la fecha les ha costado recuperarse, sin embargo se resisten a dejar el sector al no tener otro sitio donde ubicarse.
“Tenemos más de 9 años viviendo en esta colonia, en todo ese tiempo y del 2010 a la fecha, nos ha ido un poco mal, en dos ocasiones se metieron a robar algunas de nuestras pertenencias, han venido a grafitear las paredes de la casa, o rompen los cristales de las ventanas, pero así hemos aprendido a vivir”, dijo.
URGEN REDUCTORES
Las calles de la colonia Pensiones, parecieran ser tranquilas, otras veces, solitarias, pero así de improviso algunos conductores se confían de esto, transitando a exceso de velocidad y ocasionando accidentes.
Nadie respeta los reductores de velocidad, al menos los pocos que hay, los cuales quedaron destruidos por su mal uso.
“Se ha pedido de mil maneras que nos reparen los topes ya hubieron dos personas atropelladas, no sé si esperan que suceda una tragedia para hacerlos reaccionar y nos den respuesta”, reclamó una de las vecinas del sector.
El problema de contaminación ha cesado, a marchas forzadas, en cuanto a las calles y centros recreativos estos lucen en buenas condiciones, sin embargo las construcciones abandonadas, son punto de encuentro de parejitas y hasta basurero clandestino, aun peor, en hogar de alimañas.