MARGARITO ESCUDERO LUIS
Coatzacoalcos
Llamar a la gente para que salga del esquema negativo de educación que todavía se practica en la sociedad mexicana, es la misión de Omar Villalobos, conferencista motivacional, originario de Ciudad Juárez, Chihuahua, quien estuvo en Coatzacoalcos en días pasados.
Se presentó en el Teatro de la Ciudad con la conferencia titulada “El Mundo es Tuyo”, auspiciado por la Asociación Héroes en Acción, el Honorable Ayuntamiento de Coatzacoalcos, el sistema DIF Municipal y la Semarnat.
En entrevista exclusiva para El Heraldo, Omar Villalobos dijo que muchas personas creen que un cambio en la vida puede darse de la noche a la mañana y no es así.
Comentó que la gente sí cambia, pero esa labor es poco a poco, las transformaciones no son de la noche a la mañana y ese es el error que gente piensa sobre la transformación personal, pero debe ser esporádico, poco a poco.
“Yo propongo como metodología, que la gente se ponga metas chiquitas, porque si te pones metas muy grandes, el abismo que hay entre tu realidad y lograr tu meta es muy grande, por lo tanto tu energía psicológica es poca”, aseguró.
Insistió en que si la gente se traza metas chiquitas, se puede lograr avanzar hacia donde se desea.
Agregó que este proceso tiene que ver con la voluntad, “el mayor móvil de una conducta humana es la necesidad, la insatisfacción, cuando se tiene hambre, uno se levanta de la cama, mientras no haya hambre seguirá acostado, en paz”.
Dijo que cuando un individuo se siente solo, hace un acto de búsqueda, pero cuando se sientes satisfecho, pleno, entonces no hay movimiento; por lo que la carencia es uno de los principales motores a la acción.
¿Por qué mucha gente no se mueve hoy en día?, porque tal vez no carece de nada, o porque ya llegó al nivel de conformidad emocional, psicológica, afectiva, económica y se conforma con lo que tiene; para eso hay que incrementar los estándares de calidad de vida, incrementar el termómetro de desde cero para la psique mande de nuevo un móvil para lograr lo que quieres; así de simple. “La insatisfacción es el móvil de toda conducta”.
Sobre la crisis que actualmente padece la sociedad mexicana, Omar Villalobos aseguró que el principal error cuando hay una crisis, es mencionarla todos los días, porque el cerebro se programa “y cuando hablamos de crisis, crisis, crisis, lo que hacemos es que la gente vea algo negativo, estamos cumpliendo con el mismo método que hablaba en la conferencia, enfocarnos en lo negativo”.
Mencionó que ha viajado por muchos países de Latinoamérica y que recientemente estuvo en Panamá y Bolivia, ha estado en Chile, Colombia, Venezuela, y ha podido observar que México no está en crisis, en comparación con estos países. “Todo depende del punto de vista con que se vea”.
Comentó que está de acuerdo en que la gente se queje por no estar de acuerdo como se está viviendo como sociedad actualmente, pero asegura que se debe pasar a la acción, “¡Cámbialo!, ¿Cómo?, desde dentro, desde tu casa, sé justo con tus hijos, con tu mujer, ecuánime con los que tienes a tu alrededor, sé la persona que tú le exigirías a tus dirigentes con los que amas, y verán que el país y la ciudad en la que vives, se transforma”.
Sobre la respuesta que le da el público señaló que le llena de emoción y le da fuerza para continuar, porque cuando se vives dentro de los escenarios, cuando el escenario adelgaza o engorda, cuando los aplausos del público son parte de la cotidianeidad, llega un momento cuando la risa, la autenticidad, el cariño de la gente se vuelve una necesidad emocional y un alimento; y si no lo tiene, algo sucede.
Se le preguntó si todos los públicos que conoce, reaccionan con el mismo entusiasmo, a lo que respondió que cada quien reacciona con su idiosincrasia, pero en su gran mayoría ha logrado adaptar un sistema de comunicación con el público, para arrancarles sonrisas, inspiración y despertarle algo.
Aceptó que siempre hay un tres por ciento del público que no le gusta lo que hace, siempre hay gente que le parece muy excéntrico, muy loco o muy mal hablado, siempre hay críticas, pero también a ellos algo se les queda.
Finalmente señaló que le llena de alegría ver las caras de la gente, le llena de emoción verlos sonriendo, “me gusta ver mucho joven y me gustaría dejar juna pregunta: ¿Haz amado a alguien el día de hoy?”