La comerciante María Irma Martínez Martínez y su hija, de tres años de edad, fueron golpeadas por una supuesta abogada y un grupo de vándalo al oponerse a abandonar su local
Rafael Meléndez Terán
Minatitlán, Ver.
La comerciante María Irma Martínez Martínez y su hija, de tres años de edad, fueron golpeadas al oponerse al desalojo de un local comercial, localizado al interior del mercado Popular Solidaridad.
Según relató la misma afecta, una abogada, identificada como Gloria Verónica Márquez, llegó al mediodía día al negocio denominado “Irmita”, en el que expende abarrotes, con la intención de desalojarla a petición del nuevo dueño del espacio, en compañía de 12 jóvenes que la amedrentaron tirándole su mercancía a la calle, sin ninguna orden judicial.
Irma Martínez se opuso al desalojo y la abogada la comenzó a golpearla a ella y a su hija a quien jaloneó, para que desocuparan el negocio.
“Entraron en el puesto a golpearme a mí y a mi hija, venían puros hombres maleantes, me tiraron todas las cosas, a mi hija la golpearon, empujaron, la espantaron mucho”, contó mostrando un moretón en la cara, producto de los golpes que minutos antes le propinaron.
La abogada llegó acompañada de quien se dice propietario del local, Jorge Luis Rodríguez Díaz, quien le pagó a el ex esposo de la comerciante, aunque no contaba con que el verdadero dueño no es con quien hizo la “compra- venta”.
También se hizo presente la secretaria general del mercado Noemí Sánchez Martínez, avalando el desalojo.
“Llegó agresiva, no se identificó y llegó directo a golpear a mi hermana, puso en riesgo la vida de mi sobrinita también”, contó Olga Martínez, hermana de la agraviada.
De acuerdo con los testigos, este hecho pudo haberse convertido en una tragedia, porque los hermanos de la comerciante estuvieron a punto de llegar al lugar con palos y piedras para defender a su consanguínea.
Por fortuna, otros comerciantes intervinieron en el conflicto, evitando que la situación pasara a mayores y más tarde arribaron elementos de la Policía Naval, quienes se llevaron a los participantes del conflicto a la agencia tercera del Ministerio Público para interponer una denuncia por los hechos ocurridos.
Sin embargo la abogada Gloria Márquez se pudo retirar antes de tiempo al igual que quienes provocaron los daños al local comercial.
Más tarde se pudo saber que la trifulca fue originada por el ex esposo de María Irma Martínez, quien vendió de manera irregular el local comercial, ya que no cuenta con documentos que aprueben su propiedad, por la molestia que le causó el haber perdido la patria potestad de su hija, según manifestó la hermana de la locataria.
Líder avala desalojo
La secretaria general del mercado Popular, Noemí Sánchez Martínez, también fue requerida por las autoridades para declarar como testigo del conflicto.
Antes, en entrevista mencionó que “hay problemas de unos locales que supuestamente los vendieron a Jorge Rodríguez Díaz”, lo cual avaló, aunque nunca creyó que el problema se iba a agudizar.
Ella fue quien llamó a la Marina para que interviniera en el conflicto, “yo estoy apoyando a los verdaderos locatarios”, defendió.
