La Diócesis celebró con una misa a los indocumentados.
MIGRANTES
Elizabeth Aviña
Coatzacoalcos, Ver.
El obispo de la Diócesis de Coatzacoalcos, Rutilo Muñoz Zamora, reconoció que sigue habiendo falta de atención de algunos organismos o instituciones encargadas de velar por los migrantes, lo que hace que su recorrido hacia la frontera sea inseguro.
Resaltó que pese a los esfuerzos, persiste la insensibilidad por parte de las autoridades por proteger el paso de los migrantes por territorio mexicano y de la ciudadanía que sigue juzgándolos.
“Son los problemas a los que se exponen sobre todo cuando no hay esa sensibilidad por parte de las autoridades, pero nosotros seguimos haciendo nuestra tarea con el padre Joel Ireta, que trata de darle seguimiento a todo este panorama complicado”, aseveró.
En el marco del Día del Migrante, la pastoral de movilidad humana de la diócesis del puerto celebró en el puente Avenida Uno, una misa y serie de actividades culturales y recreativas para cientos de desplazados que arriban diariamente a Coatzacoalcos.
En la eucaristía se pidió porque los migrantes viajen seguros y sobre todo que encuentren a través de la palabra de Dios el camino para salir adelante junto a sus seres queridos que dejaron en su país de origen.
La mayoría de los que acudieron a esta celebración son de origen hondureño, le siguen los salvadoreños y guatemaltecos, pero ha comenzado a notarse la presencia de migrantes de Nicaragua.
Muñoz Zamora aseguró que la construcción de la nueva Casa del Migrante tendrá que iniciar a finales de este año y principios del 2019, pues se encuentran en el proceso de elaboración del proyecto.
Por su parte, el coordinador de la pastoral de movilidad humana de la Diócesis, Joel Ireta Munguía, dijo que en medio de la tristeza y dolor que viven los migrantes, el objetivo fue darles un momento de gozo y alegría para que recuperen fuerzas en su viaje.
Esta es la cuarta ocasión que se celebra el Día del Migrante en Coatzacoalcos, en esta edición se presentó un grupo folclórico, además los migrantes también disfrutaron de comida y pastel, rompieron piñatas como parte de las actividades recreativas.