1 de Diciembre de 2024

Pedro Trueba, el minatitleco orgullo de México

-Así como en el palacio de la ONU, en Suiza, o en la embajada de México en Portugal, la obra del pintor ha sido expuesta en casi todo el mundo

Rafael Meléndez Terán

Minatitlán, Ver.

El nombre de Pedro Trueba está a la par de otros grandes artistas que ha dado Minatitlán, desde la las actrices Blanca Estela Pavón, Meche Carreño o  el músico “Joselo”, de Café Tacvba, aunque para el pintor, los éxitos no son parte del recuerdo, sino de su presente y su futuro.

Humilde y dispuesto, el artista visitó Minatitlán para participar como sancionador principal de un concurso de fotografía, dentro de las celebraciones del gobierno municipal por el Día Internacional de la Mujer.

Trueba ha logrado exponer su obra a lo largo de casi todo el mundo y en mucha de ella plasma sus raíces, “los colores, texturas y la calidez de la gente de Minatitlán”.

 A los 13 años emigró a la Ciudad de México; dejó su casa en la colonia Nueva Tacoteno, su pueblo y su gente, lo que suele ocurrir cuando se busca trascender profesionalmente por falta de espacios. 

Allá en la capital estudió arquitectura, perfeccionó su técnica y persiguió sus sueños a base de esfuerzos y constancia.

Ha mostrado su obra en casi todos los continentes, aunque la que ha marcado su vida es pintar la Cúpula Transformación que pertenece  a la Conferencia Interamericana de Seguridad Social que próximamente se podrá apreciar cuando sea inaugurada en la Ciudad de México.

Este trabajo para el organismo internacional, con sede en  la colonia San Jerónimo, representó meses de trabajo, pues consistió en pintar una cúpula elevada a 15 metros y con más de 500 metros de diámetro.

 Aún a pesar del esfuerzo y la dedicación que un proyecto de esta envergadura conlleva,  el trabajo final es una de las más grandes satisfacciones para el artista plástico.

“Representa la energía, la transformación y crecimiento que se vive en cualquier espacio de América”, explicó Trueba Zepeda, quien adelantó que su apertura se dará en el próximo mes de abril. Esa ha sido la más importante de las más de nueve mil obras que tiene en su haber, admitió.

GLOBALIZA SU OBRA

Para Pedro Trueba no perder la capacidad de asombro ha sido fundamental para continuar con su trayectoria, de 25 años; ha expuesto cinco veces en Nueva York, donde ha vendido su pintura más cara: las piernas de una mujer, por la que recibió 20 mil dólares.

Al principio, como ocurre generalmente entre el gremio, su sueño era exponer en ese lar, pero él ya lo consiguió y no solo una, sino cinco veces y las que vienen, seguramente.

Así como en los trabajos de restauración del Centro Histórico de la Ciudad de México, Trueba  ha participado en otros proyectos que lo han llevado a trascender.

El año pasado, el  6 de junio de 2014, expuso dos veces en Portugal; la primera vez en la Embajada de México, donde su obra fue admirada por el mandatario mexicano y parte de su gabinete, lo que para él fue un honor.

Así también lo hizo en el palacio de la Organización de las Naciones unidas en Ginebra, Suiza, ahí dio el discurso principal en el pódium central durante la inauguración de su exposición.

Su obra, caracterizada por elementos  como el color, texturas, fusión de estilos, soluciones abstractas, fuerza, pasión y energía fue difundida en un billete conmemorativo de la Lotería Nacional, también el año pasado.

En el arte de Trueba se representan también momentos de la creación de Dios, “es conjugar y fusionar muchos conceptos abstractos con la realidad, buscando siempre exponer situaciones positivas y propositivas para el ser humano.  

DE MINATITLÁN PARA EL MUNDO

“Son muchos proyectos y trabajo siempre pensando en Veracruz, en Minatitlán, y esto se ve reflejado en los colores,  las formas y los recuerdos de lo que viví aquí”, aseguró con nostalgia.

Con esa misma añoranza recuerda los primeros trece años de su vida en esta ciudad y los mantiene muy bien impresos en su memoria, porque Minatitlán está idéntico a los años 70, “han cambiado algunas cosas, calles, pero lo veo igualito, me da nostalgia, porque solo veo un poquito el paso del tiempo y los recuerdos que tengo de mi infancia siguen intactos”.

Y así como es positivo su arte, también lo es para expresarse del futuro de Minatitlán, ciudad que –dijo--  tiene potencial para seguir adelante, pues al ser influida por el petróleo, “espero que ahora con las reformas energéticas venga un nuevo boom pero de todos modos su gente puede salir adelante de cualquier situación”. 

EL ARTE CURA

Los 25 años de exitosa carrera en este complicado mundo le dan la facultad para lanzar un mensaje a aquellos jóvenes que no tienen un rumbo definido en su vida: refugiarse en el arte.

A los “ninis” y a aquellos que buscan una vida fácil y que se encuentran sumergidos en mundos extraños y peligrosos, los invitó a curarse con el arte.

“Estoy un convencido que el arte cura, si estas personas buscan adentrarse en el mundo del arte en general, arquitectura, pintura, música, danza, verán que pasarán por un proceso de curación y cambiará su percepción de la vida hacia todo lo positivo y propositivo”. 

Es una herramienta para dar la vuelta “a la tortilla” a los problemas. Y recalcó que a pesar de que haya o no fondos o apoyos del gobierno, lo importante es cumplir los objetivos y metas que tengan de alguna manera u otra.

“He pensado que este trabajo el arte es individual, yo no me preocupo si me dan o no de dan apoyos, yo busco oportunidades de gobierno o de empresarios, como de familia que necesitan arte no estoy esperando si el gobierno da apoyo”, dijo el minatitleco, orgullo de sus paisanos.


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