Desvíos se deben ventilar públicamente, pero también se debe actuar contra ellos para que la ciudadanía vea que no hay impunidad, sentencia
Rafael Meléndez Terán
Minatitlán, Ver.
Ante las acusaciones por millonarios desvíos de recursos cometidos por la ex alcaldesa de Minatitlán, Guadalupe Porras David, el ex diputado local Flavino Ríos Alvarado, dijo que las administraciones anteriores que hayan cometido irregularidades aún no están exentas de sanciones.
Sin referirse concretamente a Leopoldo Torres García o a Porras David, Ríos Alvarado lamentó que la nueva administración tenga que pagar por pasivos arrastrados, disminuyendo así su capacidad monetaria para cumplir eficientemente con su trabajo.
El notario público refirió que existe la posibilidad de que la Legislatura local y el Órgano de Fiscalización Superior (Orfis) reabran las cuentas públicas desde el 2008, “ya que nadie está exento aún cuando hayan terminado sus mandatos”.
Deben citarlos para que aclaren, se investigue, y se resuelva conforme a la ley, porque es sano que se ventile públicamente pero lo más sano para la ciudadanía es que se actúe para que vea que no hay impunidad”, sentenció.
No ve “mano débil” del Orfis en este sentido, pues aclaró que hace su trabajo, “pero lo tiene que hacer cuando concluye el ejercicio fiscal, mientras que los ayuntamientos tienen la información reciente, porque les están llegando los requerimientos de pago de deudas que no son de esta administración”.
Espera que la Procuraduría General de Justicia actúe, “que no haya impunidad e inmunidad y que todos nos apliquemos con estricto apego a la ley”.
Dijo que, como ciudadano, espera que la autoridad haga su trabajo y en caso de que haya alguna demanda por desvíos o daño patrimonial la procuraduría actúe y los jueces administren justicia.
Señaló que las auditorías que realiza el ORFIS se ejecutan cuando concluye el ejercicio fiscal del año, no al momento, por lo que las acciones en contra de quienes violentaron el gasto público no pueden concretarse de forma inmediata.
Se dijo confiado en que el órgano fiscalizador hace un trabajo serio y responsable, turnando las observaciones a la Comisión de Vigilancia, quien determina someter al pleno el dictamen y éste votará lo que estime procedente.