*Cada año mueren hasta 30 menores en percances vehiculares o atropellamientos
*Es la segunda causa de muerte entre infantes de 5 a 10 años
Yhadira Paredes
Xalapa
Los accidentes vehiculares son la segunda causa de muerte en Veracruz, solo después del cáncer, para los niños de entre 5 y 10 años, sostuvo el secretario ejecutivo del Consejo Estatal para la Prevención de Accidentes (Coepra), Pedro Múzquiz Peña, quien refirió que en la entidad cada año mueren entre 20 y 30 menores por esta causa y 60 por ciento de este número, por atropellamiento.
El funcionario recordó que desde el lunes pasado y hasta este domingo se lleva a cabo la Tercera Semana Mundial de la ONU por la Seguridad Vial, en la que se promueven acciones para salvar la vida de niños por accidentes vehiculares.
Destacó que los municipios en donde se concentra el mayor número de casos de muerte infantil por atropellamiento son: Pánuco, Xalapa, Veracruz y Álamo, aunque el factor de riesgo, advirtió, está en todas partes.
Múzquiz Peña explicó que "en este rango de edad, de 5 a 10 años, es más probable que un niño muera atropellado, que muera dentro de un vehículo de cuatro ruedas porque no venga en su sillita portainfante o porque viaje adelante. Estamos priorizando discutir medidas para que los niños no estén solos en la calle, que no jueguen en la calle, que no sean mandaderos".
El llamado es a los padres de familia y adultos a que cuiden a los menores para evitar que sufran lesiones fatales en la vía pública.
Múzquiz Peña recordó que para un conductor de vehículos la corta estatura de los menores hace casi imposible que se pueda visualizar de manera oportuna para evitar atropellarlos.
En ese sentido, hizo también un llamado a los conductores de automotores a tomar todas las precauciones en las zonas escolares y en las calles en general.
"Tenemos que cancelar el factor riesgo, como el hecho de que los niños anden solos en la calle; hay que enseñarles a cruzar por las esquinas, usar los puentes peatonales, no atravesar a media calle y sí por los cruceros, y siempre observando que no vengan autos".
Sin embargo, reconoció por último que los pequeños son el reflejo de sus padres, por lo que es necesario empezar por educar vialmente a los padres de familia.
