No tengo miedo, no tengo ataduras, ni compromisos ni pactos vergonzantes, advierte en su informe de resultados el senador Héctor Yunes Landa.
Redacción
Boca del Río, Ver.
Ante más de 10 mil ciudadanos, el senador por Veracruz, Héctor Yunes Landa rindió su informe de resultados, donde expresó estar listo para dar la mayor batalla en Veracruz contra la desigualdad y pobreza.
Héctor Yunes Landa manifestó que cree en la preparación, en el estudio, en el esfuerzo y en el empeño y agregó que también es importante la alianza entre generaciones para construir una unidad a favor de Veracruz.
Al referirse a los jóvenes, Héctor Yunes dijo que se deben reunir a estos, “pero a los mejores, hay que convocar a la experiencia, pero acercarse a la experiencia de la buena; hay que seguir ejemplos, pero solo los más dignos, los más decentes, los más gallardos”.
El senador señaló que es momento de construir en todos los ámbitos de la vida nacional y estatal más y mejores mecanismos para asegurar gobiernos honestos y eficaces, “los ciudadanos están hartos de la corrupción y tienen razón, yo también estoy harto”.
Se dijo convencido que "hay que castigar al corrupto con todo el peso de la ley, que se trata de hacer justicia y no de cobrar venganza”.
Héctor Yunes se refirió a los dos Veracruz, al de la pobreza, al de los olvidados, y también al de la pujanza, al creativo y optimista. “Trabajo para hacer que estos dos Veracruz se hermanen para que se reencuentren, para que se vuelvan a mirar uno a otro, sin rencor y sin vergüenza”, enfatizó.
CERCANO A LAS DEMANDAS
El legislador comentó que ha recorrido la totalidad del estado y se ha reunido con los sectores productivos, sociales y religiosos, lo que le ha permitido conocer sus demandas y necesidades.
Al referirse a las reformas estructurales hizo hincapié en que apoyó la creación del Sistema Nacional Anticorrupción, mismo que crea instituciones encargadas de prevenir, investigar y sancionar los actos de corrupción en materia administrativa, “por lo que no habrá excusa para castigar a quienes hayan abusado de la confianza de la gente”.
Destacó también el apoyo a la reforma constitucional en materia de disciplina financiera que establece puntualmente las condiciones para que los estados y municipios puedan contratar deuda. “Con esta reforma cerramos la puerta a la práctica de que los gobiernos hereden bancarrotas”.
Se comprometió con los productores del campo a estar atento a que se presente la reforma al sector, misma que hará que el campo veracruzano produzca más y que las familias de las zonas rurales vivan con dignidad.
Indicó que como presidente de la Comisión de Protección Civil en el Senado de la República, orientó e impulsó medidas preventivas para garantizar la integridad de las personas y salvaguardar sus patrimonios.
En su mensaje político, Héctor Yunes Landa indicó que la mayor urgencia de nuestro tiempo es restituir el imperio de la ley: “la autoridad o se ejerce o deja de ser autoridad. Una sociedad sin ley es una nave a la deriva, donde manda la arbitrariedad y reina el miedo”.
Yunes Landa subrayó también, “No tengo miedo. No tengo ataduras. No tengo ni compromisos ni pactos vergonzantes”.
ESTOY LISTO
Además, Héctor Yunes dijo que no son pocos los desafíos que enfrentamos, y que por eso hay que comenzar de inmediato, “cuando el tiempo es breve, más vale arrancar pronto”. Agregó que en Veracruz no tenemos tiempo que perder y que está listo para arrancar.
La idea es servir a Veracruz, dijo, recuperar su grandeza y convertirlo en la locomotora de la República y para eso nuevamente confirmó que se encuentra listo.
Ante los representantes de los medios de comunicación del estado de Veracruz, el legislador veracruzano refirió que es un representante de tiempo completo.
Abundó “Tengo una pasión: Veracruz, y una emoción: su porvenir. Llegó la hora de reencontrarnos. De ser motor de la República y ejemplo de política de altos vuelos”.
Puntualizó que es el momento de sumarnos para multiplicarnos. Para volver a crecer. Para cerrar las brechas y las heridas.
LLEGÓ LA HORA
Insistió que “Es la hora de reorganizar el gobierno. De compactarlo para hacerlo más eficiente y más fuerte. Más cercano. Más confiable. De inyectar un nuevo espíritu y una nueva ética al servicio público. Que la gente ya no se acerque al gobierno. Hay que acercar el gobierno a la gente”.
Reiteró que llegó la hora de dar la mayor batalla contra la desigualdad y la pobreza. No hay más espacio para un Veracruz rico con tanta miseria, remarcó.
Y fue más allá: “Veracruz es nuestro destino común. Para enfrentar los desafíos, no hay tiempo que perder, ni talento que desperdiciar. Todos caben en este gran esfuerzo, pero sólo si estamos listos. Veracruz es mi pasión. Estoy listo”.