“Tenemos que recuperar el orden en Veracruz”, dijo el director de Tránsito Estatal, Edmundo Martínez Zaleta.
Naldy Rodríguez
Xalapa, Ver.
El nuevo Reglamento de Tránsito Estatal, vigente a partir de ayer en 209 municipios de Veracruz, tiene el objetivo de inhibir los índices de accidentes y el número de muertes y lesionados, de mejorar la convivencia entre peatones y sobre todo recuperar el orden en el estado.
Las personas que protestan y los detractores deberían de pensar en las víctimas, que suman 7 mil lesionados y 600 muertos al año, destacó el director de Tránsito Estatal, Edmundo Martínez Zaleta, quien advirtió que habrá cero tolerancia para algunas malas prácticas de la ciudadanía: manejar en estado de ebriedad y no portar casco al transportarse en motocicleta.
“Todos están acostumbrados a dejar hacer y dejar pasar, hay que erradicar la cultura de que en las calles cada quien hace lo que quiere“, dijo y lamentó que los accidentes viales se hayan convertido en un problema de salud pública al ocupar la segunda causa de muerte entre personas de 0 a 29 años de edad.
En entrevista para Grupo Editorial Sánchez, desmintió los mitos surgidas en torno a la aplicación del nuevo reglamento de Tránsito de Veracruz y aseguró que no habrá más “influyentismo” ni “juniors” para evadir la ley estatal.
“Para mí los influyentes no existen. Los jóvenes a quienes comúnmente los conocen como juniors, creen que son dueños de las avenidas y pueden hacer lo que quieran, pues hasta aquí”, advirtió.
El servidor público aseguró que es mentira que Veracruz vaya a tener las multas más caras de todo el país, pues el nuevo reglamento del Distrito Federal establece una sanción de 60 mil pesos y la máxima en el estado es de 36 mil pesos pero solo para el transporte público (por invadir rutas y utilizar unidades piratas).
Tampoco es cierto, acotó, que las personas que estén en estado alcohólico no puedan abordar un taxi, por el contrario, es lo mejor que pueden hacer en un acto de responsabilidad con ellos y los demás.
El funcionario dependiente de la Secretaría de Seguridad Pública enfatizó que es falso que se interpusieran 50 mil amparos, “no hay uno solo en contra del reglamento”, ni que quieran coartar las manifestaciones.
“Si una persona quiere hacer una manifestación se le recomienda que informe a Tránsito con seis horas de anticipación, para que le den paso por las zonas donde tienen que pasar, sólo para eso, como medida de prevención”, afirmó.
El funcionario estatal advirtió también que habrá cero tolerancia principalmente para quienes conduzcan en estado alcohólico y para quienes no utilicen el casco al transportarse en una motocicleta.
Resaltó que no habrá “condonaciones” ni permisos para personas que se creen “influyentes”, pues la ley en materia de tránsito y vialidad se debe aplicar para todos por igual.
En el encuentro que presidió el director general de El Heraldo de Xalapa, Rubén Pabello Rojas, y el director editorial Edgar Reyes González, informó que cuentan con mil 200 elementos de tránsito –que no son suficientes- capacitados y con escolaridad mínima de preparatoria, quienes tienen la encomienda de respetar y hacer valer la ley.
Sobre los costos de las multas, dijo que siempre será más caro recuperar la salud o perder la vida de un ser querido, por lo que los ciudadanos deben dar la bienvenida al nuevo reglamento.
“La multa mayor por no respetar este reglamento es tener un accidente y que pierdan la vida. Eso no tiene precio, que vas a pagar 800 pesos por pasarse la luz roja o mil 600 si vas a una velocidad mayor, pero cuánto cuesta la vida”, reflexionó.
Al reconocer que la mayoría de los veracruzanos no conoce el nuevo reglamento de tránsito, pero tampoco el anterior que estuvo vigente durante 27 años, Martínez Zaleta pidió la solidaridad y respeto de todos para que exista una sana convivencia entre automovilistas y peatones, pero sobre todo se ponga orden.
Añadió que las recomendaciones generales son: conducir con responsabilidad, tener la documentación en orden, respetar los límites de velocidad y la señalética, no utilizar el teléfono celular ni manejar bajo los influjos del alcohol.
