Para construir “muro” impenetrable ante “olas” de la inseguridad, se requiere que todos fortalezcan principios y valores, dijo el gobernador Javier Duarte de Ochoa.
Redacción
Xalapa, Ver.
La exigencia de la sociedad veracruzana es de una mayor seguridad, por ello es que el gobierno estatal ha triplicado el presupuesto en materia de seguridad pública para dar respuestas a la gente, sin embargo, se requiere del esfuerzo de todos porque la seguridad no es un tema que se resuelva “ya”, es un tema que debe prevalecer día con día.
Así lo expresó el gobernador Javier Duarte de Ochoa durante la firma de convenio de colaboración con las asociaciones religiosas del Estado con la finalidad de formar ciudadanía y donde hizo una especie de parábola comparando la situación de inseguridad con un mar de grandes olas que pueden ser detenidas por un muro sólido para no generar daños.
“En los últimos años hemos dedicado tiempo, esfuerzo, atención, recursos para construir un ‘muro’ sólido, fuerte, un muro bien cimentado que pueda contener el ‘oleaje’, la fuerza con que llega la tormenta a impactar a nuestro territorio”, refirió.
Expresó que ha sido un gran esfuerzo y sacrificio que han establecido la sociedad y el gobierno para construir ese “muro” con un material sólido, con mucha planeación, con una gran estrategia, colocando cada ladrillo, cada varilla en el lugar que tenía que haber estado, haciendo una gran inversión, tanto humana como en recursos para poder construirlo.
Sin embargo, consideró que para que haya una solución “feliz” cuando ya no existan esas “olas” que impacten contra ese muro, cuando ese muro no tenga razón de ser, cuando esas olas que de manera “salvaje” impactan dejen de hacerlo; se requiere del esfuerzo de todos y cada uno de los actores de la sociedad, de los líderes religiosos, de los que tienen una responsabilidad moral, la de generar, la de transmitir los valores, los principios que identifican a una sociedad.
“Con respeto total y absoluto a las creencias de cada uno de los presentes, a los principios y valores de Dios, eso es lo que debemos generar. Cuando la sociedad en su conjunto, el gobierno y los líderes nos unimos, coincidimos en este mismo objetivo: fortalecer los principios y valores que deben evitar a toda costa que los jóvenes desvíen su crecimiento y se vayan por puertas falsas”, pidió.
Cuando ello suceda dijo, los miles de millones de pesos que se destinan para patrullas, para capacitación, salarios, coordinación con instituciones, se podrán destinar para más escuelas, carreteras, centros de salud, espacios de desarrollo social.
Reconoció que los esfuerzos del Estado por más grandes que éstos sean se ven minimizados con el secuestro de una persona, con el robo a un transeúnte en la calle.
“Esos números por más sólidos que sean se vienen abajo porque este tema nos agrava y nos lastima como sociedad. No tiene ninguna fortaleza el venir a decirles que vamos por buen camino si siguen sucediendo –por mínimos que éstos sean- incidentes delictivos, pero yo no le puedo poner un policía a cada ciudadano, no puedo poner un policía en cada vivienda de los veracruzanos, es ahí donde forma parte muy importante la participación ciudadana”, aseveró.
El Ejecutivo estatal reconoció que muchas veces le exigen y le hacen saber de los derechos de los ciudadanos y aunque tienen toda la razón, también existen las obligaciones de ellos que en las más de las ocasiones olvidan.
Fue ahí donde pidió a los líderes religiosos presentes en Sala de Banderas de Palacio de Gobierno que ayuden a la administración estatal, que participen, que haga cada quien la parte que le corresponde si de verdad se quiere un estado seguro.
Porque más sólido, más fuerte, más alto, más ancho que se haga ese muro de contención, si no se logra parar el oleaje, seguirán azotándose las olas frente a ese muro construido, cuando el objetivo es tener un mar tranquilo, un mar en paz, un mar donde no sea necesario tener muros para disfrutar de la playa soleada o en términos reales, disfrutar de este estado.
Al finalizar, luego de agradecer la presencia de todos y cada uno de los líderes religiosos, el Ejecutivo estatal refrendó su compromiso de seguir trabajando con esmero y dijo que representa un gobierno laico, pero él cree en Dios y trata todos los días de dirigirse con los valores y principios que están establecidos, trata también de ser un buen hombre, de hacer y tomar las mejores decisiones en favor de la sociedad.
“Dios fue quien me puso en este camino, lo que le pido es que me ilumine y que me de fortaleza para seguir llevando a cabo la responsabilidad que tengo, pero necesito de todas y todos ustedes para lograr esta encomienda. Espero y se los pido encarecidamente, sean portavoces de multiplicar este mensaje a través de las diferentes iglesias y congregaciones religiosas”, expresó.