La periodista fue reconocida durante el Congreso Nacional de Cardiología.
Rodrigo Barranco Déctor
Boca del Río
La periodista Carmen Aristegui consideró que el gobernador con licencia de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, pueda ser sólo una válvula de escape para el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ante el hartazgo de la sociedad.
La comunicadora visitó la ciudad de Boca del Río en donde recibió un reconocimiento por su trabajo durante el Congreso Nacional de Cardiología, que se desarrolla en ese municipio veracruzano.
En su discurso, se le preguntó si el mandatario prófugo de la justicia en verdad se escapó de las manos de la Procuraduría General de la República (PGR) o lo dejaron ir, debido a la red de complicidades que existen.
“¿Se fue o lo dejaron ir? Porque entramos en ese terreno más grave de todos, la colusión, la complicidad, el encubrimiento y la necesidad de tener uno que otro chivo expiatorio, estamos frente a eso ¿Qué hace la sociedad mexicana ante un caso como el de Duarte que se ha puesto en el centro de la atención y que el propio sistema se va a encargar de satanizar lo satanizable?”.
“El señor Duarte no puede estar peor ante la opinión pública, pero ya se fue y veo difícil que regrese, y veo difícil que lo puedan capturar, pero todo puede suceder en un contexto de cosas en donde la sociedad mexicana ha mandado demasiadas señales de hartazgo y de indignación, pero necesitan una válvula de escape con urgencias y veremos si es Duarte esa gran válvula de escape”.
Ante eso, la periodista dudó que el Gobierno de Peña Nieto quiera investigar a fondo casos como el destino de los 25 millones de pesos decomisados al Gobierno veracruzano, monto que le fue devuelto tras un reclamo legal.
“¿Qué hacemos con aquel capitulo que tuvo lugar en el sexenio del expresidente Felipe Calderón, cuando fue incautada una cantidad millonaria de dinero en efectivo del Gobierno de Veracruz? No me acuerdo si eran 25 millones, pero por ahí andaba la cosa. Esos veintitantos millones de pesos que fueron incautados, que iban en un avión, que estaba en Toluca pues finalmente fueron devueltos con intereses al Gobierno de Veracruz, que los peleó por la vía judicial”.
Y agregó: “Nos dijeron que aquel dinero sí era del Gobierno de Veracruz, pero estaba destinado a pagar las fiestas de la Candelaria, y dijimos: a caray, ¿pues cuántos tamales compraron? Es que es increíble, inaudita la explicación. 25 millones de pesos para pagar las fiestas de la Candelaria, pues de ese tamaño nos tragamos el sapo”.