*Restauranteros recurren a bancos para sostener negocios: Canirac
Agencias
Veracruz
El presidente de la Canicac Veracruz-Boca del Río, Santiago Martínez Dordella, estimó que la actividad económica en el sector restaurantero en la zona conurbada podría recuperarse a partir de febrero o marzo del 2021, por lo que la crisis todavía se mantendrá otros ocho meses.
No obstante, el empresario advirtió que esa recuperación en el sector será baja, pues la economía estará resentida por los efectos de la emergencia sanitaria provocada por el COVID-19.
El entrevistado manifestó que el impacto negativo de la pandemia en el sector restaurantero implica años de trabajo.
“En cuanto a una recuperación de la actividad económica, pues estamos pensando que esta actividad puede empezar a recuperarse a partir de, así como la teníamos, quizá hasta febrero o marzo del año que viene, con lo cual todavía nos quedan unos tortuosos siete u ocho meses, de una economía que va a estar muy resentida, muy escasa, para nosotros ‘escaso’ es un consumo por cliente bajo y un número de visitantes bajo”, subrayó.
Santiago Martínez Dordella comentó que dueños de restaurantes recurrieron a préstamos familiares para contar con liquidez con la finalidad de cumplir los compromisos de pago que deben cubrir a pesar de los cierres temporales de sus establecimientos.
Incluso, Martínez Dordella refirió que propietarios de restaurantes se endeudaron con instituciones bancarias a través de créditos para sostener sus negocios durante la emergencia sanitaria.
“Si dejas de pagar la renta, si dejas de pagar la luz, el día que quieres regresar pues no hay local, no hay luz o no hay lo que hayas dejado de pagar (…) Ya también los créditos llega el momento donde dicen que no habrá más dinero y tampoco creo que estar pidiendo créditos sea una solución, sino simplemente alargar algo que ya perdiste, ya perdimos esa economía, ese dinero ya no circuló”, agregó.
Por último, el presidente de la Canirac Veracruz-Boca del Río dijo que unas 50 unidades de negocio ya cerraron temporalmente sus puertas en la zona conurbada ante la imposibilidad de generar entradas para su permanencia durante la emergencia sanitaria.