El mamífero había sido liberado por órdenes de la Profepa, pero varó por segunda ocasión en la zona de Chachalacas.
AVC
Veracruz, Ver.
El Aquarium del Puerto de Veracruz informa que el delfín Cabeza de Melón que fue liberado el pasado martes, por órdenes de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), varó otra vez, ahora en la zona de Chachalacas, por lo que tuvo que ser nuevamente rescatado y llevado a las instalaciones para brindarle la atención correspondiente.
El delfín había permanecido durante 12 días en cuidados intensivos, luego del primer varamiento que sufrió en las playas de la Riviera Veracruzana.
Tras presentar una importante mejoría, gracias a los cuidados del personal especializado, el mamífero marino fue devuelto a su hábitat al reportarse sano y salvo, luego de una petición que hizo la Profepa al Aquarium del Puerto de Veracruz para su reintegración al mar.
No obstante, este miércoles la Procuraduría Estatal de Protección al Medio Ambiente (PMA), recibió el reporte de que el delfín había varado nuevamente en la zona de Chachalacas, por lo que el personal se trasladó hasta el lugar para brindarle apoyo y regresarlo nuevamente al Aquarium, donde permanecerá bajo observación, como parte de su responsabilidad para el rescate y cuidado de las especies.
Hasta el momento, el ejemplar se reporta estable, se encuentra en el estanque y alimentado con pescado, el cual ha ingerido muy bien.
El Procurador Estatal de Protección al Medio Ambiente, Sergio Rodríguez Cortés, resaltó que el animal -de la especie Peponocephala Electra-, conocido comúnmente como Delfín Cabeza de Calabaza o Melón, no es una especie endémica, por lo que su presencia en aguas poco profundas no es normal.
De dicha especie, ha habido pocos registros. El único que se tiene en el Golfo de California, consiste en un animal varado en febrero de 1979 en la Isla Espíritu Santo, en la Bahía de La Paz. Años después se reportaron otros varamientos en el Golfo de México en 1990 y 1991, por lo que se desconoce su tamaño poblacional, debido a su escaso avistamiento.
Los delfines Cabeza de Melón, se alimentan básicamente de calamares, sin embargo, se han encontrado restos de peces y camarones en estómagos de algunos ejemplares.
Rodríguez Cortés, también destacó la labor de los veterinarios, biólogos y demás personal especializado, los cuales han estados muy pendientes de la salud del delfín desde que fue encontrado por primera vez.
La primera ocasión que fue rescatado el mamífero, presentaba golpes internos, pero gracias a los cuidados, logró evolucionar de manera favorable.
Finalmente, el funcionario señaló que mantendrán bajo vigilancia al delfín por unos días más y posteriormente se analizará su situación, ya que posiblemente resulte difícil su reintegración.