Ambos mandatarios confirman el restablecimiento de los lazos entre ambos países; agradecen al papa Francisco por su mediación
LA HABANA / WASHINGTON
Los presidentes de Cuba y Estados Unidos, Raúl Castro y Barack Obama, anunciaron hoy por separado el restablecimiento de las relaciones bilaterales entre ambos países, tras más de cincuenta años de tensas relaciones entre las dos naciones.
En sendos discursos casi simultáneos, Castro y Obama confirmaron que se han normalizado los lazos diplomáticos y agradecieron la mediación del papa Francisco y el gobierno de Canadá en el diálogo.
“Hemos acordado el restablecimiento de las relaciones diplomáticas. Esto no quiere decir que lo principal se haya resuelto: el bloqueo económico", indicó Castro desde La Habana.
El presidente cubano admitió que persisten profundas diferencias entre los dos países, fundamentalmente en materia de soberanía nacional, democracia, derechos humanos y política exterior, pero reafirmó la voluntad del Gobierno de Cuba a dialogar sobre todos esos temas.
“Los progresos alcanzados en los intercambios sostenidos demuestran que es posible encontrar solución a muchos problemas. Como hemos repetido, debemos aprender el arte de convivir, de forma civilizada, con nuestras diferencias", aseveró del líder cubano.
En este nuevo clima de diálogo, Castro exhortó a Estados Unidos a remover los obstáculos que impiden o restringen los vínculos entre ambos pueblos, en particular los relativos a los viajes, el correo postal directo y las telecomunicaciones.
Obama, por su parte, dijo que ha iniciado un nuevo capítulo en las relaciones de Estados Unidos con Cuba, señalando que era tiempo para acabar con un enfoque anticuado sobre la isla comunista.
“Hoy vamos a renovar nuestro liderazgo en el continente americano. Vamos a llevar las anclas del pasado porque es necesario alcanzar un futuro mejor: para nuestros intereses nacionales, para las personas que viven en Estados Unidos y para el pueblo cubano", expresó Obama.
El mandatario estadunidense aseguró que apuesta por una Cuba más libre y más próspera y tendió una un mano de amistad al pueblo cubano.
En ese marco, pidió al Congreso, que a partir de enero estará controlado totalmente por los republicanos, que inicie un debate serio y honesto sobre el embargo económico unilateral impuesto a Cuba en 1961.
Las medidas anunciadas hoy por Obama incluyen la flexibilización de las restricciones a los viajes y el comercio entre Estados Unidos y Cuba, así como a las remesas que reciben los cubanos desde territorio estadunidense.
Además, Obama ha pedido a su secretario de Estado, John Kerry, que revise la inclusión de Cuba en la lista de países a los que Estados Unidos considera patrocinadores del terrorismo.
El presidente estadunidense también confirmó hoy su participación en la Cumbre de las Américas que acogerá Panamá en abril de 2015 y a la que Cuba ha sido invitada.
“Todos somos americanos", sentenció Obama en español al final de su discurso, con una mención al héroe y poeta cubano José Martí.
El acuerdo, en el que mediaron el papa Francisco y Canadá, ha sido posible gracias al intercambio de cinco presos -tres cubanos y dos estadunidenses- y a la liberación del norteamericano Alan Gross, que estaba preso en La Habana desde hace cinco años.
El presidente estadunidense y el líder cubano hablaron ayer por teléfono para cerrar los últimos flecos de este anuncio, que se hizo público una vez retornaron a sus respectivos países esos prisioneros, entre ellos los tres espías cubanos del llamado 'Grupo de los Cinco' que permanecían encarcelados en Estados Unidos.