*Dos atentados con coches-bomba dejan más de 130 muertos en Irak
*El primero se lo atribuyó el Estado Islámico, que amenaza con más ataques
Agencias
Bagdad, Irak
Al menos 131 personas murieron y 200 resultaron heridas en dos atentados con coche-bomba en Bagdad, la mayoría de ellas en una bulliciosa zona comercial en la que los residentes celebraban el Ramadán, informaron fuentes médicas y policiales el domingo.
Ambos ataques, uno de los más sangrientos en la historia de Irak, se registraron casi al final del mes sagrado de Ramadán, cuando las calles estaban abarrotadas de jóvenes y familias que habían salido tras el ocaso.
Según fuentes hospitalarias y policiales citadas por la cadena Al Yazira, la mayoría de las víctimas cayeron en una calle comercial en Karrada, un barrio de mayoría chiíta en el centro de Bagdad.
La Policía informó que un suicida detonó el vehículo que conducía en medio de una multitud congregada cerca de la tienda de helados Yabar Abu al Sharbat, ubicada en la zona de Karrada, donde la explosión destruyó e incendió varias tiendas aledañas.
La heladería más popular y antigua de la capital iraquí estaba muy concurrida a las 1:00 horas debido a que durante el mes sagrado de Ramadán es habitual prolongar las noches en la calle.
El Estado Islámico reivindicó el atentado y advirtió que “los muyahidines proseguirán los ataques contra los renegados”, en un comunicado difundido en redes sociales, en el que aseguró que el objetivo eran los chiítas.
“En el marco de las permanentes operaciones de seguridad de los soldados del califato en la ciudad de Bagdad, el hermano muyahidín [guerrero santo] Abu Maha al Iraqui logró hacer estallar su coche-bomba en una concentración de renegados [chiítas]”, señaló el grupo terrorista.
Asimismo, otro coche-bomba explotó más tarde en el mercado popular Shalal, en el noreste de Bagdad y de población también mayoritariamente chiíta, con un saldo de al menos cinco muertos y 16 lesionados; hasta el cierre de edición nadie había reivindicado este atentado.
Horas después de los atacques, el primer ministro iraquí, el chiíta Haidar al Abadi, se trasladó a Karrada para ofrecer sus condolencias a los familiares de los fallecidos; sin embargo, su visita provocó la ira de la población.
Se trata de los atentados más mortíferos que sufre Irak desde que las fuerzas armadas, apoyadas por la coalición que lidera Estados Unidos, liberaron hace una semana por completo la ciudad de Faluya, en manos del Estado Islámico desde principios de 2014.
En el último año las tropas iraquíes han ganado terreno ante los yihadistas al retomar la ciudad de Ramadi y los pueblos de Hit y Rutba, todos en la provincia de Anbar, al oeste de la capital.
El Estado Islámico todavía controla Mosul, la segunda ciudad más grande de Irak, así como importantes territorios en el norte y el oeste del país.
Hezbolá condena atentado
El grupo chiíta libanés Hezbolácondenó el ataque suicida que causó en Bagdad la muerte de al menos 130 personas, más de 200 heridos y que fue reivindicado por el grupo terrorista Estado Islámico.
"Esta masacre nos insta a elevar nuestra voz contra las potencias regionales e internacionales que están detrás de esa clase de acciones para provocar miedo y caos en el seno de nuestras sociedades árabes e islámicas", afirmó Hezbolá en un comunicado.
El grupo también aseguró que el hecho de que este atentado haya tenido lugar en las últimas noches del mes sagrado musulmán de Ramadán es una "nueva expresión del odio de esos criminales, que quieren terminar con las sociedades árabes e islámicas, sus patrimonios y sus principios".
"Estos crímenes atroces sucedieron también en momentos en los que la organización terrorista del Daesh [acrónimo en árabe para referirse al Estado Islámico] está sufriendo sucesivas derrotas en Irak, por lo que se quieren vengar por su incapacidad atacando a civiles inocentes", agregó el comunicado.
Asimismo, el grupo chiíta presentó sus condolencias al pueblo iraquí.