5 de Octubre de 2024

Caos en Turquía

Agencias

Ankara, Turquía

 

El Gobierno turco enfrentó un sorpresivo intento de levantamiento por parte de una facción de las Fuerzas Armadas que pretendían tomar el poder en el país –según informaron– para proteger el orden democrático y mantener el respeto a los derechos humanos.

La noche del viernes un grupo de militares afirmó haber tomado el control de Turquía, mientras el presidente Recep Tayyip Erdogan pedía a la población salir a las calles para enfrentar el “intento de Golpe de Estado”.

Aviones militares realizaron maniobras sobre Ankara, la capital del país, mientras carros de combate controlaban los accesos al aeropuerto de Estambul, que quedó cerrado al tráfico aéreo.

Al mismo tiempo, numerosos vehículos blindados cortaron la principal avenida de Estambul, cerca de la sede central de la Policía de la ciudad, la más importante del país.

La Gendarmería había bloqueado los accesos a los principales puentes que unen la parte europea y asiática de Estambul.

En tanto, el Gobierno advertía que impediría toda tentativa de interrumpir la democracia: “Esto no puede ser llamado un Golpe [de Estado] en este momento, esto es un levantamiento”, declaró el primer ministro Binali Yildirim a la prensa local, durante plena movilización de las Fuerzas Armadas.

Vía telefónica a la televisión local, el mandatario dijo que el Ejército estaba actuando: “Nuestras fuerzas van a utilizar la fuerza contra la fuerza; vamos a castigar de la manera más dura” a los responsables y a tomar todas las medidas, señaló.

Al tiempo, el presidente Recep Tayyip Erdogan señaló que el levantamiento era protagonizado por un pequeño grupo de militares que no tenía posibilidades de éxito: “Tarde o temprano será eliminado", aseguró por teléfono a la emisora CNNTürk.

"Van a recibir la respuesta de la nación y van a pagar un alto precio por actuar contra la nación. No les vamos a ceder el campo. Pronto vamos a eliminar su actitud", aseguró Erdogan, cuyo país es un miembro clave de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

Tanto el presidente Erdogan como el Gobierno responsabilizaron de la asonada a lo que llevan años llamando "el Estado paralelo", es decir: los seguidores del predicador islamista Fetullah Gülen, al que acusan de intentar desestabilizar Turquía.

Erdogan insistió en llamar a la población a salir a las calles turcas para frenar a las facciones levantadas.

 

Intensa movilización

 

Miles de civiles se lanzaron a las calles con banderas turcas en respuesta al llamado del presidente Recep Tayyip Erdogan. Sin embargo, testigos señalan que también había algunas manifestaciones a favor de los golpistas, aunque eran las menos.

El levantamiento fue repelido por las fuerzas gubernamentales y con apoyo de la población civil, que se oponía físicamente al avance de las tropas golpistas.

Sin embargo, un grupo de soldados disparó contra personas que trataba de cruzar el puente en Estambul y se reportaron algunos heridos consecuencia de los disparos.

La sede de la Dirección de Seguridad en Ankara fue atacada, al menos dos veces, por aviones y helicóptero del Ejército que dejó al menos 17 oficiales muertos. La cifra de muertos fue dada a conocer por la agencia de noticias turca Anadolu.

Además, medios locales informaron que se había producido una fuerte explosión en el centro de la unidad especial de la Policía en el distrito de Golbasi, en Ankara, así como en inmediaciones de la emisora de televisión pública TRT.

Helicópteros militares también atacaron la instalación central satelital TURKSAT en las afueras de Ankara. Un vehículo civil intentó detener a uno de los tanques, pero fue arrollado. Los ocupantes del vehículo lograron escapar.

 

Fracasó el levantamiento: Gobierno

 

Horas más tarde, ya en la madrugada de este sábado, el portavoz nacional de inteligencia turca informó que el intento de Golpe de Estado había sido "derogado".

Sin embargo, imágenes de televisión revelaban que aún quedaban algunos brotes de resistencia por parte de los militares rebeldes, que serán juzgados por traición.

La televisión privada turca NTV emitió imágenes de soldados golpistas desarmados y arrestados por la Policía, en lo que parece una señal de que el Golpe militar había fracasado.


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