23 de Noviembre de 2024

Revelaciones: Dos años inútiles

Margarito Escudero Luis

La tenencia vehicular fue impuesto creado en los tiempos de Gustavo Díaz Ordaz con el fin de lograr financiamiento para los juegos olímpicos que se celebrarían en octubre de 1968.

 

Se dijo que pasando las olimpiadas, el impuesto sería retirado, pero nadie cumplió esa promesa y a 46 años de distancia, el tema vuelve a la palestra, pero ahora utilizado como una forma de distensión social.

Es decir, ante los serios problemas que atraviesa el país, especialmente el estado de Veracruz, el tema vuelve a ser tema público, luego que Javier Duarte de Ochoa anunciara la eliminación de esa imposición.

Pero los panistas aseguran que se trata de populismo, pues ese decreto ya había sido firmado por Felipe Calderón cuando fue presidente, pero nadie acató, sólo se hicieron algunas reformitas, como aquella que sólo pagarían el impuesto los autos cuyos precios rebasaran el tope de 200 mil pesos.

Ahora, justo cuando en el sur veracruzano los bloqueos carreteros y la presa Yuribia tomada por los pobladores de Tatahuicapan, tienen a más de medio millón de habitantes en un serio problema de salud y al gobierno en un serio problema político, aparece el gobernador haciendo este anuncio triunfalista, con una sonrisa de oreja a oreja, como si de verdad, nada grave sucediera en el territorio estatal.

GOBIERNO DE DOS AÑOS

Además de eso, continúa en el debate público el tema de la gubernatura de dos años, asunto que ha ocupado la atención de analistas, a los dirigentes de partidos políticos y a los aspirantes a ser candidatos a gobernador, incluso del mismo partido del mandatario estatal.

Para muchos, ambos tema pasan a ser irrelevantes ante la grave problemática a la que no se ha dado solución.

La escasez de agua en el sur, tiene en un brete al gobierno municipal que parece haber sido abandonado por el estatal, mientras siguen apareciendo cadáveres en diferentes partes de Veracruz.

El gobernador debería entender que  no sólo porque él lo desea, las cosas no suceden.

Pero lo más destacado, es que los aspirantes a la candidatura gubernamental, se salen del huacal, pierden la disciplina y comienzan a sacar las omisiones del gobierno, se asumen ahora como denunciantes de las carencias del pueblo y reclaman al gobernador que apoyaron, que encumbraron y que ahora quieren sacar del cargo.

Por ejemplo, el Senador Héctor Yunes Landa descubrió el hilo negro cuando denunció la aplicación de ley mordaza a los medios informativos a fin de que no se publique nada de lo que hace o dice, y eso tiene que ver con la postura pública que asumió  en relación a la iniciativa para contar con una gubernatura de transición de dos años.

De ello dice que huele a pacto de silencio, huele a acuerdo de impunidad, de encubrimiento, huele a reparto de botín.

Apenas se dio cuenta Yunes Landa cómo se la gastan en el gobierno del cual, hasta hace unos días era uno de sus principales promotores.

Ahora lamenta que lo0s medios de comunicación no publiquen lo que declara, como lo hacían antes de que entrara en “rebeldía”.

Sin embargo no se trata de una sopa de su propio chocolate, es parte del juego, él y su primo, el también senador, José Yunes, lo saben.

Así funciona el sistema, ese al que ambos pertenecen y, ahora enfrentan porque les conviene a sus intereses.

Remotamente, algunos veracruzanos esperan que los diputados locales no aprueben esa iniciativa, que haya un acto de congruencia y no de servilismo, que piensen (y ojalá no sea mucho pedir) en el daño que se ocasionaría a  Veracruz.

Los panistas piden, sin llegar a proponerlo, que mejor se adelanten las elecciones, con eso el gobierno de Javier Duarte tendría que terminar antes de lo previsto y se lograría el “empate” de las elecciones federales, con las estatales.

 

“Haiga salido de donde haiga salido” la idea, los diputados deberán analizar a conciencia lo que pudiera provocar una gubernatura de dos años, pues si no se puede cumplir lo que prometen en los seis años de duración del periodo de gobierno, en dos años, el gobernador se pasaría el tiempo en ruedas de prensa, anunciando lo bien que vamos.