El hombre de la tercera edad se dio un tiro en la cabeza; fue ingresado con vida al hospital pero poco después falleció.
OMAR VÁZQUEZ VALENCIA
Minatitlán
Minutos antes de darse un tiro en la cabeza, un anciano llamó a uno de sus hijos para advertirle sobre lo que estaba a punto de hacer, aún con vida el hombre de la tercera edad fue llevado de urgencias al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), ingresando cerca de las 7:30 de la mañana de ayer, minutos más tarde no resistió la lesión y dejó de existir.
Elio Romero Valdovino, contaba con 63 años de edad, según las autoridades, vivía solo en su vivienda ubicada en la calle Niño Artillero número 67 de la colonia Insurgentes Norte de Minatitlán.
Los datos recabados en la escena de los hechos, permitieron conocer que el anciano llamó a su hijo Raúl Romero Núñez, avisando sobre el intento de suicidio que estaba a punto de cometer.
Cuando su vástago llegó a la casa de su padre, lo encontró sobre un charco de sangre sentado en una mecedora y con un tiro en la cabeza en el patio trasero, para ser precisos en la sien izquierda, a unos dos metros una vieja pistola revolver de cañón largo, al parecer calibre .38, presumiéndose es el arma asesina.
Entre el desconcierto y desesperación, personal de Protección Civil de Cosoleacaque fue requerido, llegando elementos que de emergencia trasladaron aún con vida al sexagenario que al ingresar a la sala de urgencias del IMSS tuvo sus últimos minutos de vida.
Se estableció que Romero Valdovino, padecía depresión, sumado a la soledad considerados componentes que probablemente lo llevaron a tomar la fatal determinación.
El personal de la Segunda Agencia del Ministerio Público Investigador, tuvo a cargo las diligencias necesarias, enviando el cuerpo al Servicio Médico Forense, donde fue reclamado legalmente por los familiares.