MARTÍN CRUZ
NANCHITAL, VER.
La regidora tercera Bertha Inés Galvez Baruch, externó que se encuentra tocando puertas ante el Gobierno del Estado para que a los tablajeros de Nanchital les sea restituido, si no un rastro municipal, por lo menos una casa de matanza, ya que el sacrificio de los animales en localidades de la región les viene generando fuertes gastos y esto repercute en el incremento del precio de la carne.
“Soy de la postura de que tenemos que seguir insistiendo en los diferentes niveles de gobierno, en lo particular sigo tocando puertas, he estado en la ciudad de Xalapa continuamente y estoy viendo la posibilidad de tratar el tema directamente con el gobernador Miguel Ángel Yunes para que nos devuelvan el rastro”.
Recordó que hace dos años, con la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) se tuvieron algunas pláticas y se había contemplado un terreno para este fin en los linderos de la colonia San Regino, que no afectaba a ningún vecino, pero por causas desconocidas el proyecto ya no se llevó a cabo, tampoco hubo una respuesta de parte de la autoridad federal.
“Los introductores están dispuestos a apoyar, a lo mejor ellos mismos administrarlo, porque es tan necesario que Nanchital cuente con un rastro, ya que sale mucho más caro andar emigrando, por lo que los carniceros están dispuestos a comenzar con una casa de matanza para ir superando esta situación, de modo que únicamente faltaría el permiso y es lo que queremos lograr acudiendo ante el Gobernador del Estado” expuso.
La funcionaria abundó que actualmente los tablajeros realizan la matanza de los animales en Cuichapa, Allende o Mundo Nuevo y en ocasiones Minatitlán o Acayucan, lo cual ocasiona que el precio de la carne se incremente.
