En México, también son la principal causa de muerte. Solamente durante la pandemia, los decesos por este tipo de enfermedades fueron rebasados por el COVID. Sin embargo, los problemas cardiovasculares representan un grave problema de salud.
Karla Pineda Román
CIUDAD DE MÉXICO
Las enfermedades cardiovasculares (ECV) ocupan el primer lugar a nivel mundial: cada año, fallecen 18 millones de personas de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud.
En México, también son la principal causa de muerte. Solamente durante la pandemia, los decesos por este tipo de enfermedades fueron rebasados por el COVID. Sin embargo, los problemas cardiovasculares representan un grave problema de salud.
Lo cierto es que no es un padecimiento exclusivo de adultos mayores, pues cada vez se presenta en más rangos de edad, incluso en jóvenes. "Algunos de los principales factores que desencadenan los problemas cardiacos y que podemos modificar son la mala alimentación, la obesidad, el sedentarismo, el tabaquismo, la falta de educación ante la salud y el abuso del alcohol. Si los eliminamos o reducimos, no seremos propensos a sufrir enfermedades cardiovasculares.
"Existen otros factores no modificables, como la edad, sexo y antecedentes familiares. Por ejemplo, el 80% de los mexicanos tenemos un familiar de primera línea, como son papá o mamá que tienen o tuvieron complicaci ones del corazón", explica Luisa Aguilera Mora, médica cardióloga clínica, con alta especialidad en insuficiencia cardiaca, cursada en el Postgraduate Course in Heart Failure, en Londres.
Hipercolesterolemia
Uno de los principales enemigos para el corazón es la hipercolesterolemia. Se presenta cuando el llamado colesterol malo (LDL) tiene niveles elevados y puede provocar diversas complicaciones cardiacas, ya que está en la sangre y, al haber un incremento, puede obstruir los vasos sanguíneos. "Es importantísimo que la gente mida constantemente su colesterol y que lo tenga controlado. Entre más bajo esté, será mejor para evitar problemas cardiovasculares. Existen medicamentos que ayudan a reducir el colesterol, pero lo ideal es que la gente de manera natural lo tenga en los niveles indicados, de preferencia debajo de 200. "Entre el 15 y 20% del colesterol es por nuestra dieta; el 80 restante es genético, una cuestión hereditaria. Por ello, si tu familia ha tenido problemas de colesterol alto, es fundamental que desde temprana edad lo midas y tengas controlado", afirmó el doctor Max Saráchaga, director médico de Amgen México.
Asimismo, el especialista indica que, si en tu familia no hay antecedentes de colesterol elevado, puedes empezar a medirlo en la edad adulta, pero eso sí, nunca confiarse. Las consecuencias de tener colesterol alto pueden desencadenar en un infarto, un evento cerebrovascular o insuficiencia cardíaca.
Insuficiencia cardiaca
"Sucede cuando el corazón no bombea sangre de manera correcta. Para prevenir esta enfermedad debemos evitar tener hipertensión, obesidad o diabetes. No olvidemos que, al padecer hipertensión, hay posibilidad de desarrollar diabetes y viceversa. "Uno de los problemas y enfermedades que resulta más invisible para los mexicanos es la obesidad. Entre el 75 y 85% de la población vive con ella, pero la normalizan y no les preocupa. Sin embargo, la realidad es que afecta todo el cuerpo", dice la doctora Aguilera Mora, quien es presidenta de Salvando Latidos A.C., organización enfocada en prevenir, atender, diagnosticar y dar tratamientos de padecimientos cardiovasculares, principalmente a grupos vulnerables de personas.
La especialista hace hincapié en que, antes de los 40 años, hay que realizarse chequeos generales. Es necesario acudir con un cardiólogo que te diga qué estudios requieres, ya que en México desde los 20 años o menos ya hay casos de hipertensión, diabetes y obesidad.
Ataque cardiaco
Los infartos tienen lugar cuando hay una obstrucción en las venas, quizá por acumulación de grasa, pero también se puede presentar cuando el flujo de la sangre disminuye.
"Por años se pensó que los infartos eran más propensos en los hombres, pero eso es falso, porque las mujeres también lo sufren. Sin duda, lo favorecen el fumar, el beber alcohol, el sedentarismo y la mala alimentación. Esos malos hábitos son los que no solo dañan al corazón, sino a todo el cuerpo.
"Durante su etapa reproductiva, las mujeres están protegidas por estrógenos, pero con la menopausia disminuye, y es ahí cuando podría empezar el riesgo de un infarto. Ellas fallecen más por infartos porque buscan atención médica tardía ya que aguantan más el dolor, mientras que los hombres, ante el primer dolor, vamos con el médico", menciona Saráchaga, quien es especialista en ginecología y obstetricia por el Centro Médico Nacional La Raza. Y añade que, si tienes antecedentes familiares de problemas cardiovasculares, por ejemplo, si tu tío falleció por un infarto a los 45 años, lo ideal es que visites al cardiólogo a temprana edad.
Algunos síntomas comunes
"Muchas causas de muerte son asintomáticas, quizá llevan años con la presión alta, el colesterol elevado y no hay síntomas. No siempre sucede, solo en algunas ocasiones. Por ello, es recomendable que hagan visitas periódicas al médico: más vale prevenir.
"Puedes sentir un dolor en el pecho, del lado del corazón o que te aprietan el centro; o un malestar que recorre hasta la boca del estómago, al brazo o a la mandíbula. Habrá quienes sí acudan al cardiólogo, pero otros van al dentista o al gastroenterólogo y, si no se detectan, se está perdiendo tiempo en el diagnóstico", mencionó Aguilera. Otros síntomas pueden ser palpitaciones rápidas, cansancio, sudoración fría, falta de aire, piernas o pies hinchados, mareos o desmayos, entre otros. Sin duda, un dolor de pecho no es el único síntoma: son diversos los que pueden estar avisándote de una complicación mayor.