*Pleito con Frida Sofía lo tiene en la ruina
Agencias
Ciudad de México
Enrique Guzmán, de 78 años, estaría en una profunda depresión luego de los señalamientos de abuso que hizo en su contra su nieta Frida Sofía, de 29, en abril pasado. De acuerdo con un trabajador de él, Enrique está muy angustiado, ya que la demanda que interpuso para limpiar su nombre no avanza, ha perdido oportunidades de trabajo y vive un escarnio social porque la gente lo señala de abusador.
“El proceso va lento y eso lo tiene muy desesperado porque no se puede resolver la situación. Otra cosa que lo tiene mal es que la gente no ha dejado de atacarlo, le escribe cosas feas en redes y hasta en persona le han hecho groserías. Al principio le enojaba, pero ahora le entristece que lo juzguen por algo que asegura que no cometió”, mencionó el trabajador del cantante, quien habló anónimamente con TVNotas.
ENRIQUE GUZMÁN NO TIENE NI UN PESO
De acuerdo con lo que contó el empleado, Enrique tuvo una presentación en junio, vía streaming, pero no recuperó nada de lo invertido, además de que esta situación agravó sus malestares provocados por la diabetes, “a raíz de esto se volvió a poner mal, se le sube o baja el azúcar; además su presión arterial se desestabilizó y sus ganas de vivir han mermado”, mencionó.
Agregó que en las últimas semanas Enrique ha estado lleno de temor y melancolía, ya que “tiene mucho miedo de que todo salga mal y llegue a pisar la cárcel, dice que no lo soportaría. Nunca le ha gustado pedirle nada a sus hijos, y aunque Alejandra le ha propuesto ayudarle con los gastos de abogados, ella también tiene sus propios gastos de salud”, dijo.
Fue en abril pasado cuando Frida Sofía denunció que su abuelo abusó sexualmente de ella cuando era pequeña. Tras esto, él demandó por difamación y ella hizo lo propio en contra de él y de su mamá, Alejandra Guzmán, de 53 años, por los delitos de abuso sexual, violencia familiar y corrupción de menores.