- El reggaeotenero reveló que los excesos que vivió durante 15 años lo acercaron a la muerte
AGENCIAS
MÈXICO
Sin miedo al qué dirán y con la honestidad a flor de piel, Nicky Jam habló del lado oscuro de su vida y de los problemas de adicciones que vivió a lo largo de 15 años.
Sin bien es cierto que ahora es uno de los reggatoneros más famosos y con más éxito dentro del mundo de la música, su vida no siempre fue color de rosa, ya que en su infancia sufrió mucho y supo, en carne propia, lo que eran la pobreza, la violencia y las carencias.
“Vengo de una madre drogadicta, un padre drogadicto. Fui drogadicto por quince años. Yo vengo de la pobreza. De lo más feo que tú te puedas imaginar”, dijo en una reciente entrevista.
Nicky, confesó que llegó a tener serios problemas de salud que lo tuvieron al borde de la muerte: “No podía mover las manos, tenía problemas para hablar. El neurólogo me dijo que no sabía qué era lo que tenía. Cuando es un problema de aquí de la cabeza, no hay nada que se pueda hacer; lo único que te aconsejamos es que te quites de cualquier sustancia que te estés metiendo porque te puede dar una trombosis y te puedes morir”, agregó.
Pero por fortuna, esta situación y una promesa que le hizo a Dios lo sacaron adelante: “Me tocó encerrarme cinco días para quitarme del vicio y mi papá me estaba cuidando y de ahí para adelante yo le hice una promesa a Dios que no iba a consumir una sustancia”, contó.
Recientemente, Farruko, también reveló que había encontrado a Dios por lo que dejaría de cantar canciones consideradas pecaminosas, algo que no fue muy bien visto por sus fans.
