Agencias
Marca
Sevilla y Barcelona no pasaron del empate a pesar de que el cuadro local se quedó con un jugador menos en el Estadio Ramón Sánchez-Pizjuán en partido pendiente de la jornada 4 de LaLiga de España.
Era el partido del enganche, como títulamos la previa en MARCA. Una victoria sevillista le colocaba a tres puntos del Real Madrid como seria alternativa al título y un triunfo azulgrana le aupaba a la cuarta plaza, puesto de Champions, el gran objetivo catalán. Xavi repitió el equipo que salió ante el Elche con el único cambio de la entrada de Piqué, tras su sanción, por Lenglet. Jutglá seguía como referencia arriba. Lopetegui, sin sus laterales titulares disponibles, colocó a Koundé en el lateral y al todoterreno Fernando como central. La primera media hora fue de tanteo con una mayor posesión del Barça. La presión de los de Xavi era más efectiva y el Sevilla apenas retenía el balón.
Fue Rafa Mir, en el minuto 27, el primero en probar suerte ante la meta rival con un remate alto. Dembélé puso la réplica tras un fallo de Ocampos y obligó a Bono a lucirse. A la tercera fue la vencida y fue fruto de la estrategia. Córner que bota Rakitic sobre un Papu Gómez que se deshizo de la marca de Ez Abde y cruzó el balón entre un mar de piernas que imposibilitaba la visión a Ter Stegen. Al Sevilla se le ponía el partido de cara pero en la última jugada antes del descanso el Barça consiguió el empate. Córner botado por Dembélé y cabezazo impecable de Araujo. Casi no dio ni tiempo de sacar al Sevilla cuando Del Cerro Grande señaló el descanso.
En la segunda parte el Sevilla salió con otro talante. Sin especular fue directo a por el partido con una presión más fuerte. Delaney tuvo una buena ocasión que se quedó a medias entre centro y tiro. La posesión era más de los locales y esperaban la ocasión para matar el partido. Todas las acciones del Barça partían de Gavi ya que no encontraban las bandas pero Bono no sufría. Pero el dominio local sufrió un inesperado revés en el minuto 65 cuando se quedó con uno menos por la expulsión de Koundé. Al francés se le fue la cabeza y lanzó un balonazo sobre la cara de Jordi Alba después de recibir dos empujones del lateral azulgrana y perder los nervios.
El partido entró en otra dimensión después de la expulsión con algunas entradas feas y fuera de lugar como un rodillazo de Rafa Mir sobre Eric García que le obligó a ser sustituido por Lenglet. La grada del Pizjuán celebró la vuelta de En-Nesyri después de mucho tiempo lesionado. Pese a estar con uno menos, los de Lopetegui no recularon y mantuvieron la presión a la salida del balón del rival. Pero las mejores ocasiones fueron azulgranas. A falta de 10 minutos Gavi tuvo una buena opción para el 1-2 tras un centro de Ez Abde pero su cabezazo se fue desviado. Y la más clara la tuvo Dembélé con un disparo desde fuera del área que se estrelló en el poste. La última la tuvo Jordi Alba con un remate que detuvo Bono. No se movió más el marcador, Sevilla y Barcelona se autodestruyeron y firmaron un empate que no gustó a nadie.