Elizabeth Aviña
Coatzacoalcos, Ver.
Foto: Gladys Collado
Con la intención de devolverles la dignidad a las mujeres que la han perdido por las diversas problemáticas que atraviesan en su vida diaria, la predicadora católica, Kimberly Kramar de González, estuvo en Coatzacoalcos para impartir la charla titulada “Mujer levántate y camina, digna hija de Dios”.
La dama que proviene de los Estados Unidos y que predica en toda América y parte de Europa, dijo que su labor de evangelización la realiza desde hace 20 años, siempre intentando ayudar al género femenino, para levantarse tras una “caída” y que aprendan a caminar con la cabeza en alto.
“En México muchas mujeres son afectadas por la violencia, o tienen familias disfuncionales y no encuentra la solución, sin saber que no es imposible salir adelante, sobre todo con la ayuda de Dios quien las hará seguras, sanas y libres”, afirmó.
El error que las mujeres tienen, dijo, es que piensan que tienen que soportar todo lo que viven por sus hijos, se sienten avergonzadas y sin respuesta, por lo que a través de su evangelización, Kramar de González, les da herramientas para que sigan adelante.
En este sentido informó que por esta situación muchos divorcios se dan, sin saber que Dios les puede dar respuestas a sus problemáticas.
“Dios no quiere que una persona esté en una situación donde la violentan física, sexual o psicológicamente, por eso la iglesia sí permite en algunos casos la separación porque respeta la dignidad de esa mujer y le ayuda de forma profesional, sobre todo para tratar de que llegue a la reconciliación con su pareja”, expuso.
La evangelizadora comentó que cuando una dama se llena de la gracia de Dios y comprende que merece más y que no puede permitir más maltratos, en lugar de divorciarse se acerca a que “el señor” le dé la respuesta, para así comenzar un cambio en su casa, con su esposo y/o con sus hijos.
“Deben saber que ya no pueden ser víctimas, que deben cambiar y que Dios delimitará esta situación y podrán poner un hasta aquí y ser felices”, puntualizó.
Antes de la plática que tuvo lugar en un conocido salón ubicado sobre el Malecón Costero, invitó a las féminas a sumarse a esta tarea de evangelización, sobre todo para transmitir a otras damas la fuerza y la palabra de Dios para salir adelante.
Durante el evento se pararon actividades al mediodía para rezar el “ángelus”, y para pedir por la paz y por las mujeres de Coatzacoalcos.