OMAR VÁZQUEZ VALENCIA
Cosoleacaque, ver.
De nuevo la escuela “Sebastián Lerdo de Tejada” se ve involucrada en un caso de probable discriminación, ahora ocurrido en agravio de un niño con hipoacusia (disminución de la capacidad auditiva y sin habla).
De acuerdo con el relato de la madre de familia, Ruby García, todo se desarrolló en los momentos que intentó inscribir a su hijo en dicho plantel ubicado en la calle Eulalio Vela del primer cuadro de Cosoleacaque, recibiendo la negativa por parte de la directora del instituto a la que identificó bajo el nombre de María Guadalupe López Domínguez.
Puntualizó la inconforme que por dicho hecho, tuvo que interponer la queja correspondiente ante las instancias educativas, manifestando encontrarse consternada por los hechos exigiendo justicia para el caso que hoy explica.
En entrevista a esta medio de comunicación declaró “tengo dos gemelos de 8 años de edad, uno de ellos tiene hipoacusia profunda, ellos estudiaron en esta escuela el primer y segundo grado, por el trabajo de mi esposo tuvimos que trasladarnos al estado de Guerrero. Sin embargo mis hijos no se acostumbraron y tuvimos que regresarnos”.
Siguió diciendo que “al tratar de inscribir de nuevo a mis hijos me dice la directora de la escuela que no contaba con lugar para mis hijos, después me enteré por las madres de familia que la maestra seguía inscribiendo al mismo grupo de tercer grado, negando a mi hijo con la capacidad diferente un sitio dentro de la institución.
Ruby García, madre de los gemelos, dijo que al solicitar nuevamente la atención a la directora de la escuela primaria “Sebastián Lerdo de Tejada”, recibió como respuesta que solo recibiría a uno de los niños, negando el acceso al estudiante de tercer grado con base a la discapacidad que presenta.
“Estoy consternada, tuve que inscribir a mi hijo hasta Coacotla, no entiendo como no pueden recibir a mi hijo por la capacidad diferente que presenta por eso estoy exigiendo que se me haga justicia”, puntualizó la madre de familia.
Es necesario recordar que se trata del segundo caso de discriminación ocurrido en el instituto a cargo de la profesora María Guadalupe López Domínguez, siendo el primero de ellos ocurrido contra un estudiante con autismo, mismo que era blanco de bullying y señalamientos.
