Amenaza Pemex con exploración y perforación a terrenos ejidales en zona serrana indígena del sur.
Flavia Morales / AVC
Pajapan, Ver.
Hace 32 años, Don Alejandrino Rivera Salas llegó hasta una comunidad en Pajapan y junto a un puñado de hombres peleó las tierras que entonces acaparaban ganaderos de la zona.
Ahí se establecieron y fundaron la comunidad El Pescador, que hoy está amenazada por la reforma energética.
De sus 1 mil 175 hectáreas de territorio, 676 más de la mitad, están señaladas por Petróleos Mexicanos para la exploración y extracción de hidrocarburos.
La información está en páginas oficiales, aun cuando ahí no ha llegado personal de Pemex, ven sobrevolar helicópteros sobre su pueblo, y sobre su mayor tesoro : La Laguna del Ostión, donde ellos preservan más de 120 hectáreas de manglar.
El Pescador es un pueblo náhuatl donde se siembra maíz y frijol, ubicado entre cerros, lagunas, manglares, y donde a unos kilómetros se abre el mar azul de las playas de Pajapan. Aquí los ejidatarios aseguran que defenderán sus tierras con su vida de ser necesario, saben que están amenazados por al menos dos proyectos, la extracción de hidrocarburos y la Zona Económica Especial.
“No nos vamos a quedar con las manos cruzadas, estamos acostumbrados a la lucha, porque las tierras no nos la regalaron, las defendimos y no vamos a permitir que vengan ( las empresas) a desbaratar lo que ya trabajamos”, afirma Alejandrino.
Acompañado de Estanislao y Pedro Palacios Muñoz, comisariado ejidal, recrimina que la carretera, los puentes, el pavimento de sus calles lo han logrado a base de presión bloqueando carreteras para presionar al gobierno. Ahora no tiene derecho a llegar a ocupar y destruir lo que tanto les ha costado hacer en sus tierras.
¿Zonas Especiales para quién?
Estanislao Palacios Muñoz llegó al El Pescador siendo un niño, y cuestiona al gobierno “Dicen zonas especiales, pero para quién, nosotros decimos que es una gran mentira que vayan a generar empleos, estamos tristes y enojados porque como dice Zapata, la tierra es de quien la trabaja, y no vamos a ceder”.
Pedro Palacios Muñoz, adelanta con apoyo del Movimiento Regional Indígena en Defensa y Respeto por la vida, los ejidatarios ya firmaron actas de asamblea y las inscribirán en el Registro Agrario Nacional (RAN) para hacerle saber a la autoridad que se rechaza toda intención de proyectos extractivos en la zona.
“Es preocupante la llegada de las empresas porque lo primero que buscan es el agua, y van a contaminar nuestros ejidos, y no queremos esa agua, quieren que dejemos migajas de contaminación a nuestros hijos”.
La reforma energética para los habitantes es aun incomprensible, la conocen porque ven en televisión al presidente Enrique Peña Nieto hablar sobre ella, decir que va a generar empleos, pero no se habla de las afectaciones, cuestiona Alejandrino.
“Nuestra gente no está preparada, van a venir a invadirnos, a nuestros mandos acuíferos, solo dan la cara bonita pero no de los perjuicios”.
Tulín
El destino petrolero de Tulín, municipio indígena en la Sierra de Soteapan está diseñado, Pemex lo tiene ubicado para la extracción de hidrocarburos, tiene ubicadas también las parcelas, afirmó Gelacio Hernández Reyna, comisario ejidal.
Hace menos de un año, personal de Petróleos Mexicanos llegó hasta la comunidad, hizo mediciones y les comunicaron que hay yacimientos de hidrocarburos, la información la corroboraron después, su ejido es parte de la Ronda cero donde más del 28% de los ejidos sería usado para extraer hidrocarburo.
La paraestatal ha llegado lentamente a la comunidad, hace menos de un año estableció un comedor comunitario, la comida es casi gratuita apenas 5 pesos, lo que preocupa al pueblo porque en el municipio las personas son muy pobres.
Tulín vive de la siembra del café, el frijol, pero para los campesinos cada vez es más difícil la siembra porque la tierra está dañada por los herbicidas y plaguicidas que se usan, para conseguir recursos, algunos habitantes han optado por irse a otros estados del país en busca de trabajo.
En la comunidad fundada en 1905 ya se organizaron, firmaron un acta de asamblea apoyados también por el Movimiento Regional Indígena en Defensa y Respeto por la vida, “Aquí tenemos dos manantiales y no vamos a aceptar que vengan y nos contaminen, ya firmaron actas, y ningún ejidatario va a permitir la entradas”, dice.
Gelacio se queja dice que apenas tienen tierra para trabajar, alguno la tienen que rentan, y si llegan las empresas petroleras los dejarán sin tierra.
Mecapayan, territorio amenazado al 100%
Hace varios años, Petróleos Mexicanos entró a las parcelas en la comunidad de El Naranjo, municipio de Mecayapan. Nadie sabe con certeza qué fue lo que hizo en las tierras, pero dejó algunas marcas que con el tiempo se fueron perdiendo entre la hierba. En ese entonces esas perforaciones contaminaron un pozo profundo en una de las parcelas que ya nunca se limpió.
Ahora el 100% de su territorio está amenazado por la extracción de petróleo, y al igual que otros municipios de la región ven sobrevolar helicópteros sobre su comunidad.
Adelfo Hernández, comisario ejidal, no sabe con exactitud qué tipo de proyectos van a llegar, pero teme la amenaza de una expropiación o el paso aún en contra de su voluntad.
“No creo que nos guste que vengan a agarrar algo que es nuestro. Tenemos nacimientos de agua, y por ahora estamos bien, tenemos visitas de turismo a ver el paisaje, si llegan y hay contaminación eso se va acabar”, reflexiona.
Los campesinos de El Naranjo viven de la tierra, siembran frijol, papaya, maíz y sandía, temen que eso se acabe con la llegada de las empresas petroleras. Edgar tiene apenas 26 años de oficio campesino, las tardes las ocupa para informar a su pueblo, al principio los ejidatarios no creían que Pemex llegaría y su territorio era parte ya de rondas y licitaciones internacionales.
Poco a poco la comunidad ha sido informada, en la cancha de la escuela se han organizado en grupos para montar una televisión y dar a conocer a los habitantes de lo que las empresas han hecho en otros lugares y lo que ahora es una amenaza latente para su pueblo.
En el mapa quinquenal de exploración y extracción de hidrocarburos 2015-2016 las tierras aparecen marcadas con un distintivo café, donde Pemex revela que ahí habrá trabajos de exploración y extracción de hidrocarburos convencionales.