Al menos 40 personas murieron y más de cien resultaron heridas este 22 de marzo en un tiroteo seguido de un incendio en una sala de conciertos de un suburbio de Moscú, atribuido por las autoridades rusas a un "sangriento atentado terrorista".
Redacción
Moscú, Rusia
El Estado Islámico (EI) reivindicó este viernes 22 de marzo el ataque que se cometió en una sala de conciertos de un suburbio de Moscú, en el que murieron al menos 40 personas, según las autoridades rusas. Combatientes del EI "atacaron una gran concentración (...) en las afueras de la capital rusa, Moscú", indicó el grupo en un comunicado difundido en la aplicación móvil de mensajería Telegram.
Al menos 40 personas murieron y más de cien resultaron heridas este 22 de marzo en un tiroteo seguido de un incendio en una sala de conciertos de un suburbio de Moscú, atribuido por las autoridades rusas a un "sangriento atentado terrorista".
"El balance provisorio del atentado terrorista perpetrado en el complejo Crocus City Hall es actualmente de 40 muertos y de más de cien heridos", indicaron las fuerzas de seguridad (FSB).
Rusia condena ataque y lo califica de terrorismo
Unidades especiales de la Guardia Nacional rusa [Rosgvardia] operan en el sitio del ataque y están "buscando" a sus autores, añadió este organismo en la mensajería Telegram.
La cancillería rusa atribuyó a "un sangriento atentado terrorista" la tragedia, que se produjo en un auditorio de Krasnogorsk, un suburbio en el límite noroeste de la capital rusa.
"¡Toda la comunidad internacional debe condenar este crimen odioso!", afirmó Maria Zajarova, la portavoz del Ministerio ruso de Relaciones Exteriores.
Alcalde suspende eventos públicos, deportivos y culturales
El alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, anunció la anulación de "todos los eventos deportivos, culturales" y de carácter público durante el fin de semana.
Una periodista de la AFP vio el edificio de la sala de conciertos en llamas y una humareda negra que se desprendía del techo.
Según un reportero de la agencia rusa Ria Novosti, personas con uniformes de camuflaje irrumpieron en la sala y abrieron fuego antes de lanzar "una granada o una bomba incendiaria, provocando un incendio".