Agencias/México.- Durante 2023, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) aplicó 431 mil 782 dosis de vacuna BCG contra la tuberculosis a recién nacidos.
El objetivo es prevenir la tuberculosis meníngea, que es la forma más grave de esta enfermedad.
Por lo cual, señaló que es importante poner una dosis única al nacer, ya que una vez superada la etapa de recién nacido, este padecimiento puede afectar los pulmones y hay mayor riesgo de un contagio persona a persona.
Lucy Isabel Morales Márquez, titular de la División de Prevención y Detección de Enfermedades, señaló que la detección oportuna y un tratamiento adecuado ayudan a la cura de esta enfermedad que se propaga en el aire cuando una persona infectada habla, tose, estornuda, escupe o canta.
Indicó que los grupos más vulnerables a contraer esta enfermedad son los que padecen desnutrición y diabetes mellitus.
También las personas que viven con VIH, que tienen dependencia al alcohol u otras drogas y quienes se encuentran en situación de calle.
Morales Márquez advirtió que “ante la presencia de tos persistente por más de dos semanas, con o sin flema, acompañada de fiebre, pérdida de peso y fatiga, se debe acudir al médico familiar para recibir valoración diagnóstica y, en caso de ser confirmada la enfermedad, se debe aplicar el tratamiento adecuado”.
Agregó que de manera general, el tratamiento contra la tuberculosis puede durar de seis meses a un año, sin embargo, dependerá de la localización de la enfermedad, su evolución y respuesta a los fármacos.
La especialista expuso que en caso de convivir con un paciente con tuberculosis “es necesario protegerse con una mascarilla de alta eficiencia en la primera fase del tratamiento, mantener las medidas de higiene como lavado de manos y desinfección de espacios en casa, así como mantener las habitaciones ventiladas e iluminadas para que circule el aire y evitar la concentración de bacterias y partículas”.