En una verdadera bomba de tiempo, que amenaza cientos de automovilistas y empleados, se ha convertido la gasolinera que se encuentra a unos 100 metros de lo que se conoce como el Crucero de Pajaritos.
Decenas de pipas y tracto-camiones han tomado como estacionamiento permanente el patio frontal de la mencionada estación de gasolina, sin que ninguna autoridad ni los dueños del establecimiento tomen medidas que metan en cintura a los abusivos conductores de esas unidades.
Ese patio que debe ser utilizado por los clientes de ese negocio, es copado por las pesadas unidades, lo que obstruye de manera importante la visibilidad, sobre todo cuando se van a incorporar a la carretera, por lo que ya han ocurrido accidentes y pueden seguir ocurriendo si no intervine la Policía Federal, Protección Civil e incluso el famoso Comité Local de Ayuda Mutua (CLAM), que está constituido por las diversas empresas asentadas en el corredor industrial.
Las áreas verdes de algunos fraccionamientos de vivienda popular en el municipio de Coatzacoalcos, se han convertido en el objetivo de decenas de personas, que más por ambición desmedida que por necesidad, se han posesionado de esas fracciones de terreno, que forman parte de las áreas comunes de dichos desarrollos urbanos.
Tal es el caso de Puerto Esmeralda, asentamiento humano que se hizo por la empresa Geo, la cual dejó áreas verdes y de equipamiento urbano, como parte de los requisitos que marca la Ley para poder extender una licencia para efectuar esas obras. Sin embargo esto al parecer es letra muerta, en virtud de que ahora se pueden ver negocios grandes y pequeños como papelerías, ferreterías y de alimentos, mismos que han sido construidos en esos terrenos.
Cabe mencionar que las áreas verdes no son solo para cumplir un requisito de los fraccionadores, se trata de áreas comunes, que son propiedad de todos los colonos, por lo que ningún particular tiene el derecho de disponer de ellas, ni la autoridad puede desincorporarlas en favor de persona alguna, salvo que sea con motivo de utilidad pública, lo cual no es el caso de ninguna de las áreas invadidas. Es necesario poner orden, de lo contrario las unidades habitacionales estarían condenadas a convertirse en una gran mole de concreto.
El conocido rancho “El Mangal”, que fue centro de operaciones del extinto líder Cirilo Vázquez Lagunes, fue testigo de la develación de una estatua en honor de ese personaje, querido por muchos habitantes de Acayucan y lugares circunvecinos. A diez años de distancia de ocurridos los hechos sangrientos, donde perdiera la vida el conocido político y ganadero, es notable la influencia que sigue teniendo a través de sus hijos Fabiola, Regina, Cirilo y Ponciano, quienes en la última década han ocupado diversos cargos de elección popular, lo que más allá de su capacidad y preparación académica, el apellido que les heredó su padre y la gratitud de mucha gente, ha sido un factor determinante para que evocando la memoria del llamado “cacique del sur”, muchos ciudadanos sigan depositando su voto de confianza en los herederos.
