Un tema que era necesario las autoridades le pusieran atención, tiene que ver con el “servicio” de grúas en todo el estado de Veracruz, donde hasta la fecha impera un absoluto desorden y abuso en contra de los automovilistas, quienes después de que sus unidades son transportadas sin el mínimo cuidado, tienen que acudir a los famosos corralones para ser extorsionados con cobros y conceptos fuera de la realidad. Se dice que los dueños de corralones y grúas son algo así como los notarios públicos (con honrosas excepciones), que cobran lo que quieren y como dice el dicho popular; “según el sapo, es la pedrada”.
En ese sentido, el gobierno que encabeza Miguel Ángel Yunes Linares, ha dispuesto a través de Luis Emilio Díaz, nuevo director de Tránsito y Transporte del Estado, que se suspenden todos los operativos de grúas en la entidad veracruzana, incluso si hubiera un motivo para llevarse un vehículo, será prioritario dar oportunidad al propietario de mover su unidad, si está estorbando o en lugar prohibido. Otra parte importante de esa nueva disposición, tiene que ver con la revisión de los permisos y documentación relativa de las empresas de grúas para saber si operan de manera regular, de lo contrario se les retira la concesión.
Sin duda que esta medida le sumara simpatías al actual gobierno, políticamente este tipo de anuncios suele ser muy rentable. Sin embargo, se espera que no vaya a ser sólo una medida para que entren nuevos concesionarios y al final de cuentas prevalezcan los mismos vicios y contubernio con las autoridades, no se trata del clásico “quítate tú para ponerme yo”.
Ahora que el proceso de entrega-recepción se encuentra en marcha en todas las dependencias del Gobierno del Estado, algunos se van, otros llegan con ganas de servir o de servirse, eso se verá en el desempeño. Sin embargo, vale la pena reconocer el trabajo de algunos o algunas, como la Presidenta de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje número 16, María de Jesús Ríos Blanco, quien desde que asumió el encargo se le ha visto con un trabajo responsable. Más allá de sus funciones como Presidenta de la Junta, se encargó de darle un nuevo rostro a las oficinas, que al cambiarlas de sede, ofrecen a los ciudadanos un espacio más confortable donde realizar sus gestiones en materia laboral.
A lo anterior podemos agregar, que si de resultados efectivos y reales se trata, en esa Junta se han resuelto más de 26 mil asuntos, cosa no fácil en tiempos de burocratismo y de un gobierno muy cuestionado en muchas otras dependencias, que le quedaron a deber a los veracruzanos.