1 de Octubre de 2024

Crónicas del poder

José Luis Pérez Cruz

 

Ramón Ortiz, un 

liderazgo emergente

 

En dos días se cumple el primer plazo oficial para conocer a los posibles aspirantes a las candidaturas independientes para las presidencias municipales en Veracruz.

La crisis económica y social que se vive en el estado ha mermado la posibilidad que muchos se apunten para competir electoralmente.

La tramitología electoral también funge como un obstáculo serio en las intenciones de aquellos que no tienen partido y desean con su esfuerzo e inteligencia contribuir al bienestar social de la comunidad en la que se desenvuelven.

En Coatzacoalcos, ya en el anterior proceso se instalaron al menos dos opciones sin instituto político.

Esteban Valles Martínez, presidente de la Asociación Civil Productores del Sur, el cual obtuvo su registro al documentar cerca de 6 mil 914 firmas ante el OPLE y logró 3 mil 629 sufragios en las casillas, un porcentaje de 3.02.

Roberto García Alonso presentó 8 mil 383 firmas de apoyo y en las urnas apenas alcanzó 1 mil 340 para un 1.44 por ciento del total de la votación. 

Candidaturas independientes que a pesar de los resultados, causaron ruido. Son 5 mil votos reales que a alguien pueden servir, sobre todo cuando cada vez menos gente acude a las urnas.

La indefinición de algunos partidos en el municipio -salvo en el PRI, que parece claro quién es el que camina ya como candidato- está dejando a otros fuera de la candidatura independiente. El calendario electoral y la negociación interna los atrapó y no hay tiempo ya para cumplir con requisitos. 

Una aspiración que al igual a la de aquellos que irán por un partido político, pasa sólo por dos asuntos torales: estructura y dinero para intentar tener un buen resultado.

 

EL FIEL DE LA BALANZA

 

Es aquí donde, sin duda, habrá que valorar la labor que vienen realizando algunas asociaciones y fundaciones junto con sus líderes, quienes podrían convertirse en el fiel de la balanza y definir la victoria para la fórmula en la que jueguen.

No basta sólo el trabajo en tierra, el recorrido por zonas vulnerables y la legitimación de proyectos sociales fuera de las instituciones políticas; hoy la ciudadanía aspira a liderazgos genuinos y ese es el reto.

De ahí que difícilmente alguien solo pueda sacar al “buey de la barranca” en el próximo proceso electoral.

Vaya ni la Morena de López Obrador que en los últimos días se ha debilitado “moralmente" ante las denuncias de imposiciones de aspirantes en Coatzacoalcos, Minatitlán, Cosoleacaque y Nanchital, por mencionar algunos municipios.

Militantes ven como se reproducen las prácticas que tanto denostaron al PRI, al PAN y al PRD. Ahora presuntamente hasta despensas y cobertores regalan.

Es así que ante la falta de credibilidad en los partidos políticos en Veracruz, algunos liderazgos emergentes en cada ciudad definirán la elección municipal.

Sumar amigos o generar una gran alianza electoral con o sin partidos tradicionales, generará ventajas sobre el rival político.

Al menos eso es lo que cree Ramón Ortiz Cisneros, presidente de la Fundación Grupo Ortiz, quien viene trabajando desde hace algunos años en apoyo a los sectores vulnerables de Coatzacoalcos.

El también transportista, ha marcado su espacio más allá de la tradicional entrega de apoyos, esa práctica que sólo consiste en dar y dar y no más.

Ortiz Cisneros declara buscar transformar conciencias a través del trabajo recíproco con aquellos beneficiarios de viajes de arena para relleno de calles, de sillas de ruedas o de brigadas médicas.

Una retroalimentación que prolongue y solidifique el bienestar y no quede en el altruismo momentáneo.

Esa labor ha generado una dinámica donde cada vez más adeptos se suman a la transformación social y política.

De ahí que no es descabellado que esfuerzos similares como el Ramón Ortiz Cisneros confluyan en la necesidad de unirse para demostrar la fuerza en un proceso electoral.

La gran alianza de liderazgos emergentes puede significar la diferencia en la próxima elección. El trabajo de Ramón puede ayudar a muchos.

Sería un error que los partidos desdeñaran la labor que cargan en sus espaldas los grupos no tradicionales del poder.

 

AL OÍDO

 

Ayer el gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes, anunciaba el plan anticrisis para Veracruz luego de declarar la emergencia financiera.

De entrada, el choleño busca cambiar el presupuesto que dejó la administración prófuga saliente y que según sus cifras “tiene un déficit de 21 mil millones de pesos”.

Un punto más es que se “revisarán las estructuras orgánicas a fin de evitar duplicidad de funciones para hacer menos costoso el Gobierno; y se consolidarán las compras, contrataciones, arrendamientos y servicios para lograr ahorros sustantivos”.

Además mencionó que se reducirán "radicalmente" gastos de comunicación social, viáticos y gastos de representación.

Un punto importante es que busca eliminar “236 regidurías en los 212 ayuntamientos del estado, para generar un ahorro de 137 millones de pesos anuales, más de 550 millones en el siguiente cuatrienio”.

Una medida que, sin duda, será aplaudida y aprobada ya que ahí es donde han cohabitado un gran número de zánganos de la política.

Algunos incluso fueron designados directamente por Fidel Herrera y Javier Duarte de Ochoa.

 

Twitter:@joseluisperez67

Correoelectrónico: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.

Página web: códigoveracruz.com