La ligereza de un funcionario de la Secretaría de Salud, Carlos Monroy, ex director técnico de Telesecundarias federales en el estado de Puebla, al hacer un comentario irresponsable en las redes sociales en relación a los voladores de Papantla: “Hagamos patria y exterminémoslos; ellos solo viven de nuestros impuestos, sin aportar nada, son unos chupasangre”. Esa expresión desafortunada refleja la verdadera personalidad de quien la emite, ciertamente alguien con ese perfil de rechazo a una de las tradiciones declarada Patrimonio Cultural de la humanidad, no merece ocupar ese cargo dentro de uno de los tres niveles de gobierno.
En ese sentido, el senador de la República, Héctor Yunes Landa, ha dirigido una carta al gobernador del estado de Puebla, José Antonio Galy Fayad, a quien le solicita su intervención para que este funcionario sea cesado de inmediato del cargo que ostenta. A la voz de Yunes Landa se deben unir la del Gobierno del Estado y la de miles de veracruzanos que nos sentimos agraviados, ya que no puede haber indiferencia ante un ataque que se hace a una de las tradiciones que nos enorgullece y le da identidad ante el mundo entero, a nuestra entidad.
Es un hecho que el diputado federal y ex alcalde de Cosoleacaque, Cirilo Vázquez Parissi, habrá de contender por segunda ocasión en búsqueda de lograr la candidatura para la alcaldía de ese municipio enclavado en el sur sureste de Veracruz. Sólo es cosa de unos días para que el legislador, descendiente de don Cirilo Vázquez Lagunes, presente su licencia ante el pleno de la Cámara de Diputados.
Una vez con licencia en mano, puede inscribirse para empezar sus actividades proselitistas; no ha revelado aún por qué instituto político iría en esa nueva etapa de su carrera política, pero lo que sí es un hecho confirmado, es que va por la presidencia municipal de Cosoleacaque.
Aunque se diga lo contrario, la percepción ciudadana, al menos en el sur de Veracruz, es que los índices delictivos y de violencia se han incrementado en el último mes, así lo demuestran los más recientes crímenes, ya sean de la delincuencia organizada o del fuero común. Por lo que respecta al robo por ejemplo, estos hechos se han dado en los últimos días en los lugares más insospechados como la Tesorería municipal, donde no obstante tener vigilancia y contar con cámaras de video, el delito se consumó.
Otro de los lugares donde de manera insólita entraron a robar los delincuentes, fue en la clínica del Seguro Social, eso ocurrió el pasado viernes, donde el guardia de seguridad fue sometido y los hechos quedaron registrados en el video de las cámaras del propio hospital.
Lo cierto, es que el esquema de seguridad que está operando no ha dado los resultados que se esperan y mientras se toman las medidas o se hacen los ajustes, la ciudadanía está en peligro constante. Hay quienes abogan porque regrese la Gendarmería, otros añoran la Policía Intermunicipal o la Municipal, pero lo cierto es que esto no es nada sencillo, no se trata sólo de cambiar el nombre de los cuerpos policiacos, sino de la creación de verdaderas policías con vocación, buen salario y ganas de servir.
