Una condición sine qua non, para que se pueda resolver cualquier problema, es en primer lugar reconocer que este existe, de lo contrario la negación constante solo sería como jugarle al avestruz, que enterrando la cabeza en el hueco piensa que todo está bien. En el caso de las condiciones que en materia de seguridad, afronte el estado de Veracruz, el gobernador ahora ya reconoce, que los índices delincuenciales se han incrementado de manera considerable, eso ya es un avance. Sin embargo, cuando se refiere a los once cuerpos que aparecieron en Boca del Rio, saca de inmediato sus conclusiones y asevera que se trata de enfrentamientos, entre grupos del crimen organizado.
Esa conclusión, que de alguna manera es algo así como un deslinde, la verdad no nos deja satisfechos a quienes tenemos la necesidad de transitar por la entidad veracruzana. No se trata solo de decir que se están disputando el control, lo cierto es que en ese fuego cruzado están millones de veracruzanos, que más allá de un diagnóstico, quieren una solución de fondo en materia de seguridad. La llegada de la gendarmería, esta focalizada solo una región del estado y mientras tanto que pasara en el sur, donde está comprobado se ha disparado la violencia, sobre todo en los grandes municipios de Coatzacoalcos, Minatitlán y Las Choapas.
En ese sentido, empresarios de Coatzacoalcos, ya empiezan a elevar la voz, para que los gobiernos federal y estatal, vean lo que está pasando en el sur y manden elementos de ese cuerpo de elite policiaco, llamado gendarmería. Mientras tanto, el ayuntamiento porteño, ya parece que al fin les cayó el veinte en la recta final del cuatrienio y ahora se disponen cumplir un compromiso de campaña, como es la rehabilitación y funcionalidad de las casetas de vigilancia.
Al mismo tiempo, ya se están alistando jóvenes, para fortalecer lo que se conoce como policía turística (que de eso no tiene nada), se comenta que los perfiles de quienes atendieron la convocatoria, son de gente que cuando menos termino la preparatoria, incluso los hay que terminaron una carrera universitaria. Esa pudiera ser la base la nueva policía municipal, una vez que se retome la determinación de volver al viejo esquema, que tuvo que desaparecer por estar infiltrado por la delincuencia.
Mientras en otros institutos políticos, como la alianza PAN-PRD en Coatzacoalcos, aun están en el estira y afloja, para definir su candidato o candidata a la presidencia municipal; en el PRI, el diputado cetemista con licencia Carlos Vasconcelos, surge como candidato de unidad y empieza a caminar, tratando de convencer al electorado, para que apoyen su proyecto para el municipio porteño.
en un escenario donde existe la posibilidad, de que participen hasta ocho candidatos, el revolucionario institucional, avizora la posibilidad, de que pueda vencer con lo que se conoce como el “voto duro”; si consideramos que llevaría candidatos, pan-prd, morena, movimiento ciudadano, el partido encuentro social, nueva alianza, partido del trabajo y el independiente, además del pri, estaríamos en un escenario, donde los que son anti priistas, se estarían dividiendo entre las otras siete opciones electorales, lo cual en definitiva, le estaría abriendo la puerta al tricolor, al que no se puede dar por muerto, en un escenario donde las elecciones se viven de manera más intensa, como son los comicios municipales.
