Javier Duarte y la trama Odebrecht
Paola Rojas
En agosto de 2011, el ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte, viajó a Brasil para entrevistarse con Marcelo Bahía Odebrecht, en aquel momento CEO de la constructora más grande de América Latina. Este mes, Marcelo cumple un año de haber sido condenado a 20 de prisión por el escándalo de corrupción y red de sobornos que involucran a su empresa, con funcionarios y hasta mandatarios de varios países del mundo.
A Duarte lo acompañó su amigo, confidente y gran aliado Moisés Mansur. Fueron para anunciar a los cuatro vientos que Odebrecht y su filial Braskem, que manejaba aquí Roberto Bischoff, invertirían en el complejo industrial más importante de este sexenio: Etileno XXI.
Esta planta, construida en Coatzacoalcos, Veracruz, representó una inversión de 5 mil 200 millones de dólares. Se trata de la obra industrial privada más grande en 15 años y la mayor inversión en el sector en 3 décadas. Es capaz de producir un millón de toneladas anuales de polietileno.
Etileno XXI firmó un contrato de 20 años con Pemex en 2010, e inició operaciones en junio del año pasado. A pesar de que ha tenido que enfrentar el problema de la inseguridad al sur de Veracruz y algunas fallas en el abasto de etano por parte de Petróleos Mexicanos, se espera que represente un impacto positivo en la balanza comercial de mil 500 mdd anuales.
Con esto queda claro que funcionó el vínculo Marcelo Odebrecht-Javier Duarte. Ahora lo interesante es saber qué negociaron ambas partes y si los ex funcionarios forman parte de la red de sobornos que dio a conocer en diciembre pasado el Departamento de Justicia de EU, concretamente la Corte del Distrito Este de Nueva York.
Conocidos de Duarte de Ochoa aseguran que el gobierno de Veracruz tenía otro proyecto interesante con Odebrecht en la región norte de Xalapa, tema que se presume también fue abordado en aquella visita a Brasil.
La PGR, la Función Pública y Pemex revisan a detalle cada contrato y adjudicación de la constructora brasileña y de su filial Braskem. Pronto podrían anunciarse los primeros nombres de la red de sobornos.
EL HUERFANITO. Mientras Javier Duarte sigue escondido quién sabe dónde, Moisés Mansur sí se deja ver. El hombre que pagaba hasta la tarjeta de crédito de la ex primera dama veracruzana Karime Macías, suele disfrutar del sol quintanarroense. Isla Dorada en Cancún se anuncia como “un condominio residencial náutico de lujo”. Si alguien lo extraña, puede presentarle ahí sus saludos.