30 de Septiembre de 2024

En esta esquina

Daniela Herrerías

 

¿Qué es un xennial?

 

¿Lo había usted escuchado? Si no cabe en los años ni la definición de la generación X pero tampoco en la de los milenials y mucho menos en la generación Z, entonces, siga leyendo esto.

Se le denomina Xennial, a los nacidos entre 1977 y 1982, es decir, la “generación bisagra”, esos que conocimos el correo con timbre postal y entramos a internet a través de un pitido de teléfono.

Recordamos todavía números de memoria, solemos tener esa cosa extraña a la que llaman “sentido común”, tuvimos un celular hasta que íbamos en la universidad y, lo mejor de todo… somos los que tenemos buena memoria en cuanto a política mexicana se refiere, nacimos “con la devaluación encima”, no nos tocó el 68 pero tenemos muy en cuenta la canción ridícula de Solidaridad, vimos con horror cómo creían los adultos el “Ya, ya, ya” de Fox… y hoy, con horror, vemos cómo todos van directo al desfiladero con el mesías tropical.

Aún más, vemos cómo unos cuantos desmemoriados intentan fundar, refundar y refundillar (dijera el choco) otros partidos políticos y movimientos que las más de las veces, solamente buscan perpetuar la riqueza que por años (siglos) han mantenido gracias a su accionar en los puestos de poder.

Esos “xennial” son los que hoy quizá no decidan una elección como los milenial, en número, pero deberían saber que alguien como Kumamoto se mantiene en el mapa por parecer tener algo que carecen todos los políticos mexicanos…(y no, no me refiero a la honestidad y honradez) sino al sentido común. Ese mismo sentido común que hace torcer bocas cuando sendos chapulines utilizan colores a discreción solamente para acceder a un puesto de poder.

Misma situación ocurre en la Lucha Libre mexicana, es verdad, las nuevas generaciones son aquellas que están creciendo con perfiles de Facebook en lugar de fanáticos afuera de las arenas, de fanáticos que hacen videos y graban las luchas en lugar de aventar un vaso con agua de riñón o mentarle la madre al luchador, en primera fila.

Pero, también hay que decirlo son xennials justamente, los luchadores que hoy encabezan las carteleras, los que hablan de la lucha libre con pasión, quienes miran como un sueño alcanzado, quienes viven sus fantasías infantiles y juveniles a través del deporte espectáculo. Esos que también tuercen la boca cuando empresarios, promotores y vivales quieren que regalen el trabajo, que se desvivan por nada y que no valoren su arte solamente por la posibilidad de la exposición mediática.

Con los días, veremos qué tanta fuerza cobran los Xennial en los medios de comunicación, plagados hoy, de millenials que no se comprometen con nada, ni siquiera con su gato.

Nos vemos en la siguiente conversación desde esta esquina, en la otra, está su opinión. Subámonos al ring de las redes.

@daniherrerias