Una decisión acertada es la que tomó José Antonio Wilburn González, director de la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento (CMAS) de Coatzacoalcos, quien el día de ayer en rueda de prensa dio a conocer los incentivos para quienes decidan hacer el pago anual anticipado en el consumo de agua. Los beneficios que se ofertan por parte de la dependencia aplican solo a los usuarios que estén al corriente con sus pagos y van desde un 10 hasta el 50 por ciento de descuento para los jubilados, pensionados y adultos mayores de 65 años.
Aunque la finalidad de tal disposición es aumentar la recaudación, lo cierto es que se trata de una medida que vale la pena considerar, habida cuenta de que representa un ahorro, salvo la mitad de los 94 mil consumidores que no están al corriente. Lo que llama la atención, es el hecho de que ahora sí se considera a los adultos mayores, ya que un gran número de ellos no gozan de pensiones ni jubilaciones y subsisten con el producto de su trabajo o sus ahorros.
Dicen los políticos cuando llegan al poder mediante el voto popular que una vez en sus funciones, se acaban los colores y gobiernan para todos, pero eso es nada más en el discurso, porque en la práctica la realidad es otra; al menos así está ocurriendo en ese conflicto que se ha desatado entre el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares y alcaldes del partido Morena, que no han atendido el llamado que se les ha hecho por parte del titular del Ejecutivo estatal para acudir a las reuniones de seguridad.
La negativa de los alcaldes morenistas para acudir a esas reuniones ha desatado una serie de declaraciones nada cordiales, tanto por parte del gobernador, así como declaraciones de los alcaldes electos, que se han justificado para no acudir, pero han enviado representantes, mismos que no han sido admitidos para su participación, lo cual ubica a ambas partes en posiciones inflexibles. Mientras tanto, los ciudadanos esperan que exista una verdadera coordinación entre los niveles de gobierno para combatir lo que es la preocupación mayor de la sociedad veracruzana, como es el tema de la inseguridad.
Una gran muestra de solidaridad, es la que dieron decenas de minatitlecos después del acto vil y cobarde en que perdiera la vida el indigente conocido como “El turco” o “El güero sudán”, quien fuera víctima de un criminal que lo roció de gasolina para después prenderle fuego. El hecho recibió una condena unánime a través de las redes sociales, pero más allá de eso, mucha gente cooperó para hacerse cargo de los funerales de un personaje que era ampliamente conocido y formaba parte del paisaje urbano de Mina.
Aunque hay quienes han criticado que solo ahora después de muerto existen lamentaciones e intenciones de ayudar y no cuando estaba en vida, lo cierto es que hubiera sido más lamentable que no se hubiera hecho nada y se mostrara indiferencia. Es necesario que la sociedad no pierda la capacidad de asombro, que la muerte de esa persona no sea inútil, que nos haga reflexionar, que también sea un llamado de atención a las autoridades para que se investigue y se castigue al culpable. La víctima no era influyente, pero era un ser humano.
