29 de Noviembre de 2024

AGUAS CON NELSON

¿Injerencias de la FINA en la Federación Mexicana de Natación?

NELSON VARGAS

A raíz del conflicto existente en la natación mexicana, cuya Federación ha sido suspendida por la FINA, se ha dicho a los medios de comunicación por altos funcionarios del deporte nacional que la FINA se ha inmiscuido en temas internos que solo corresponden a la Federación Mexicana de Natación.

Este argumento no solo es falso y justificativo de las arbitrariedades que han sucedido al interior de esa entidad, sino que, por el contrario, son dichos funcionarios quienes están cometiendo una injerencia en un asunto que no es de su competencia. Ninguna organización deportiva estatal puede injerir y mucho menos desacatar, como está sucediendo, una decisión de la máxima autoridad mundial de los deportes acuáticos, como es la Federación Internacional de Natación, respaldada por el TAS, que es el Tribunal de Arbitraje Deportivo.

El gobierno de la Federación Internacional de Natación es universal y su Constitución y Estatutos así lo establecen, dejando claro que esa entidad tiene plenos poderes sobre todos sus Miembros (países afiliados) para hacer cumplir las normas establecidas, escritas, vigentes, aprobadas en sus congresos, por lo cual las acciones al interior de uno de sus Miembros (países) son vigiladas y controladas por la FINA.

La Regla C10 del Reglamento FINA “SUSPENSIÓN O TERMINACIÓN DE LA MEMBRESÍA", en su inciso C10.3 establece que “La Mesa tendrá la facultad de expulsar o suspender a un Miembro (entiéndase país) por violación de las Reglas FINA. El Miembro respectivo puede apelar la decisión de la Mesa al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS)".

Otro inciso de las Reglas FINA, el C10.6, establece muy claro que “en circunstancias excepcionales, la Mesa puede designar un Comité en la medida en que el órgano ejecutivo de un Miembro no se adhiera a las prácticas de buen gobierno, transparencia, responsabilidad financiera y estabilidad, o ponga en riesgo la organización y desarrollo de las actividades acuáticas en su país”. “El mandato del Comité de Estabilización puede incluir lo siguiente”:

C10.6.1 Gestionar los asuntos diarios del Miembro.

C10.6.3 Revisar y modificar los estatutos.

C10.6.4 Organizar y realizar elecciones.

Y así ha sucedido. La Mesa (entiéndase el Buró de la FINA) ha sancionado a la Federación Mexicana de Natación suspendiéndola de sus funciones y ha nombrado un Comité de Estabilización, atendiendo a su Constitución y Estatutos, para manejar los deportes acuáticos hasta en tanto se realicen nuevas elecciones.

Los directivos de la FMN, ejerciendo su derecho, establecido en los propios Estatutos de la FINA, recurrieron al TAS, Tribunal de Arbitraje Deportivo, entidad que denegó su apelación, otorgando la razón a la decisión tomada por la Federación Internacional de Natación y a los argumentos presentados por aquélla.

La decisión del TAS tampoco se ha cumplido y hoy, en franca rebeldía, han desconocido tanto las acciones de la FINA como la resolución del TAS, con abierto y público apoyo de la institución deportiva gubernamental.

¿Quiénes injieren en asuntos que no son de su competencia? No es la FINA, que solo aplica sus reglas universales. La injerencia proviene de quienes protegen el estado de cosas que han sucedido y suceden en esa Federación, abusando de su poder y desde una institución gubernamental.

Utilizar la palabra injerencia constituye una falsedad, deliberadamente politizada, con la intención de confundir a las autoridades superiores del país, como si se tratara de una agresión externa, cuando en realidad lo que se pretende es poner orden en una Federación ineficiente, que ignora a sus propios atletas, que no los apoya y que, además, ha violado las Reglas de la Federación Internacional.

No está demás señalar que todas las Federaciones Internacionales actúan de igual manera, con Reglas que son de obligatorio cumplimiento para todos sus afiliados, con autoridad para intervenir y suspender a los Miembros que no cumplen con las normas establecidas. La FINA no es excepción.

Así las cosas, así los favores mutuos entre directivos del deporte mexicano, que solo perjudican el buen desempeño de los deportes acuáticos, cuyo potencial en nuestro país es enorme y pudiera ser, como lo ha sido en muchas ocasiones, ejemplo para muchos países.