28 de Noviembre de 2024

PLATA O PLOMO

Peligro en ruta

ALEJANDRO HOPE

“Tal, o poco menos, era el estado que guardaba el camino de Veracruz en la época en que pasaban esos acontecimientos, siendo inútil decir que aparecían sus partidas, que nada tenían que ver con Evaristo, por el rumbo de Chalco, por el Pinal de San Agustín, en las cercanías de Perote y realmente no se disfrutaba de una seguridad completa sino de Jalapa a Veracruz. Llegó el caso de que la diligencia fuese asaltada y robada cuatro veces.”

Así describía Manuel Payno, en su célebre novela “Los Bandidos de Río Frío”, el estado de los caminos en el México del siglo XIX. Mover personas o mercancías entre dos puntos de la República era actividad de alto riesgo. Los ladrones cazaban a los viajeros y casi no había traslado que no terminara en asalto.

Un siglo y medio después, algo ha cambiado, pero menos de lo que quisiéramos. Los robos al autotransporte, tanto de carga como de pasajeros, son extraordinariamente frecuentes. De acuerdo a un reporte de la empresa especializada Sensitech, se registraron en México 19,876 incidentes de robo de carga. En promedio, 54 al día.

La buena noticia es que esa cifra es ligeramente menor (-6%) a la de 2020. La mala es que el número de incidentes en México es 25 veces mayor que los registrados en Estados Unidos (según la misma fuente).

Esos robos, además, casi siempre involucran violencia y ponen en riesgo la vida de los conductores. Según Sensitech, 85% de los incidentes ocurrieron cuando la unidad estaba en tránsito. Y en 87% de los casos, el operador fue retenido. Esa modalidad, asimismo, va al alza: el número de incidentes con retención de operador aumentó 6% en 2021.

Los ladrones de caminos atacan todo tipo de carga, pero algunos sectores se ven particularmente afectados: en 2021, casi la tercera de los incidentes de robo involucró a camiones transportando alimentos y bebidas. Le siguieron en frecuencia los bienes misceláneos, los productos de hogar y jardín, y el alcohol.

Los incidentes suceden en todo el país, pero hay regiones considerablemente más riesgosas. El Estado de México concentró 37% de los robos de carga en 2021 (la entrada a la Ciudad de México por la autopista a Querétaro es un foco rojo). Puebla se ubicó en segundo lugar, con 12% del total. Siguieron en orden Guanajuato, Veracruz, Jalisco y Michoacán. Combinadas, esas seis entidades federativas representaron dos terceras partes del total.

Por si fuera poco, mucho de esto sucede a plena luz del día. Sensitech destaca que 57% de los incidentes reportados ocurrieron entre las 6 de la mañana y las 6 de la tarde.

El fenómeno tiene implicaciones económicas serias. Según información de la Concamin, las primas de seguro para algunos tipos de carga han aumentado hasta 150% en años recientes. Las empresas de logística se han visto obligadas a utilizar rutas alternativas o a invertir cantidades millonarias en equipos preventivos. Según datos de la Encuesta Nacional de Victimización a Empresas (ENVE), elaborada por el Inegi, 136,000 unidades económicas instalaron dispositivos de localización en sus vehículos, lo cual significó un costo agregado de casi 8 mil millones de pesos en 2019.

Todo esto acaba repercutiendo en el nivel de precios al consumidor, como lo reconoce el propio gobierno al incluir el combate al robo de carga en su Paquete contra la Inflación y la Carestía (Pacic). No hay desarrollo posible si no es posible trasladar de manera segura personas y mercancías.