2 de Diciembre de 2024

Secretaría de Economía, en los huesos por la austeridad

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  • En 2018 se le aprobó un presupuesto de 9 mil 578 millones de pesos, pero para este año se redujo a apenas 3 mil 960 millones, una caída de 59%.

El Universal 
CIUDAD DE MÉXICO

En el sexenio actual el presupuesto para la Secretaría de Economía (SE) se redujo en más de la mitad respecto al cierre del gobierno anterior, lo que se tradujo en desaparición de programas de apoyo a empresas, así como de promoción al comercio exterior, lamentaron especialistas y exfuncionarios.

Todo ello tiene que ver con la reducción presupuestal que registra la dependencia, a la que en 2018 se le aprobó un presupuesto de 9 mil 578 millones de pesos, pero para este año se redujo a apenas 3 mil 960 millones, una caída de 59%.

Con el inicio de la actual administración se eliminó la oficina de ProMéxico, encargada de impulsar las exportaciones y atraer inversiones, además de que desapareció el Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem).

Se redujeron las aproximadamente 50 delegaciones y subdelegaciones, quedando sólo 33, a través de las cuales la dependencia atiende diversos trámites, como los de importación y exportación.

Además, las oficinas de representación comercial en Canadá, China, Bélgica, Japón, Francia, Uruguay se cerraron el 31 de octubre de 2019. La oficina en Washington D.C. hasta hace unos meses sólo operaba con una secretaria, indican fuentes cercanas a esa área.

Programas eliminados

En un comparativo realizado por EL UNIVERSAL se encontró que en esta administración desaparecieron distintos programas del Ramo 10 del Presupuesto de Egresos de la Federación aprobado para la Secretaría de Economía.

Es el caso de la Subsecretaría de Minería y el Fideicomiso de Fomento Minero, que fue eliminada y tuvo en el último año del sexenio pasado un presupuesto aprobado de 7 mil 503 millones de pesos, mientras que se creó el programa Regulación, Modernización y Promoción de la Actividad Minera, con sólo 183 millones de pesos.

También desapareció ProMéxico, que en 2018 contó con mil 157 millones de pesos para la promoción de las inversiones y de las exportaciones, y el Fondo Nacional del Emprendedor, que tenía 3 mil 940 millones de pesos destinados a impulsar a emprendedores.

También desaparecieron el Programa Nacional de Financiamiento al Microempresario y a la Mujer Rural, que tuvo en 2018 una asignación de 8 millones 318 mil pesos, y el Programa para el Desarrollo de la Industria del Software y la Innovación, con 225 millones de pesos.

Dejaron de aparecer en el presupuesto el Programa para la Productividad y Competitividad Industrial, con 165 millones de pesos en 2018, y los Proyectos Estratégicos para la Atracción de Inversión Extranjera, con 241 millones de pesos.

En tanto, en esta administración aparecieron dos programas, uno por 529 millones de pesos para actividades de apoyo administrativo, y otro por 34 millones 924 mil pesos para Actividades de Apoyo a la Función Pública y Buen Gobierno.

Algunos de los programas desaparecidos de la Secretaría de Economía se llevaron a otras secretarías o a Nacional Financiera y Bancomext, aunque también con menor presupuesto.

Comercio, a la deriva

Ildefonso Guajardo, secretario de Economía en el sexenio anterior, destacó que la reducción presupuestal en este gobierno afectó actividades del comercio exterior, porque se cerraron las oficinas de representación en el extranjero, como la de Washington D.C., que atendían exportaciones mexicanas, demandas antidumping, la implementación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), acuerdos de suspensión y diferencias y asuntos comerciales.

"Es una lástima que el capital humano acumulado con más de 30 años de experiencia de negociaciones comerciales internacionales se haya dilapidado como se hizo", dijo en entrevista.

El exnegociador del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, Jorge Molina, dijo que sólo permanece abierta la representación del país ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Por una supuesta "austeridad republicana" se cerraron oficinas en el extranjero, y aunque en realidad se ahorra poco, se pierde mucho, porque son oficinas esenciales para realizar labores de inteligencia comercial y resolver aquellos "irritantes comerciales" que se presentan, dijo el exjefe de negociaciones técnicas del T-MEC, Kenneth Smith Ramos.

"Más de 50% de los negociadores del T-MEC, del tratado con Europa y del TIPAT [tratado transpacífico] salieron, no renovaron las plazas temporales, y de un universo de 120 negociadores, se redujo a menos de 60. Después, a lo largo de estos cinco años han seguido saliendo, tienen pérdida de memoria histórica, de capacidad de darse abasto".

Smith Ramos comentó que “"este sería el primer sexenio sin cerrar un tratado comercial y se dejaron de firmar los acuerdos de protección de inversiones, tema que veía la Consultoría Jurídica y la Dirección de Comercio y Servicios".


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