Enviamos un cordial saludo y un abrazo muy fuerte para una mujer de hierro puro, sorprendente, admirable, guerrera, buena madre, esposa, amiga, prima, en fin, una gran persona, adjetivos quedan cortos para describirla y es por eso que le deseamos todo el éxito del mundo y muchos años más de una buena vida, muchas felicidades Marthita Ricárdez Arguello.