Agencias
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Gallos Femenil está a días de disputar su primera Liguilla, lo que tiene con ilusión a la mediocampista Karym Iturbe, quien no pudo evitar recordar el momento en el que llegó a las filas de Querétaro con el sueño latente de levantar un título: “Me acuerdo perfectamente el primer día que llegue a esta institución. La verdad quería marcar historia, me dije que quería ver en este escudo una estrellita y me ha costado, pero el saber que poco a poco con trabajo en equipo entramos a liguilla y que estamos a nada de poder alcanzar lo anhelado, me genera mucha ilusión”, dijo sonriente.
El nombre de Iturbe es hoy por hoy uno de los más sonados en el certamen, lo que no es coincidencia, pero aunque sus cualidades dentro del terreno de juego regalan alegría a los aficionados, años atrás estuvo a punto de alejarse de las canchas: “Viví una de las etapas más tristes y duras en mi vida porque desde que tengo memoria me ha gustado el futbol, pero una vez llegue llorando a mi casa y le dije a mi mamá que me gustaba mucho este deporte, pero que era mala , entonces recuerdo muy bien que me dijo: tal vez no estás entrenando lo suficiente, pero debes hacer lo que te haga feliz y si la gente se va a burlar porque eres mala déjalos que se rían, tú disfruta lo que te apasiona y desde entonces vivo con ese consejo de mi mamá que me ha motivado a estar hasta donde estoy”, relató con voz entre cortada.
Por otro lado, elogió a su estratega Carla Rossi, a quien le agradeció por los consejos y la confianza que ha puesto en ella: “Ahorita me siento muy tranquila y positiva. Me manejo mucho por vibras, energías y no tengo miedo porque sé que si lo hago mal ella me va a apoyar y si no también, de verdad es una entrenadora a quien admiro y respeto mucho”, indicó. “Su apoyo creo que nos ha impulsado a todas, pero hablando de mí el sentir ese respaldo y además saber que atrás está mi equipo es como si fuéramos 40 personas adentro de la cancha, lo que hace que juegue sin presión, nada más disfrutando”, remató.
