Agencias
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Nicolás Benedetti estuvo cerca de salir del Nido. El futbolista colombiano se aferró, decidió no ir a Mazatlán a pesar de que las negociaciones estaban pactadas y se quedó con las Águilas para cumplir con su revancha personal, la cual, al menos ha iniciado de la mejor forma.
El Poeta suma un gol y un par de asistencias en sus últimos 115 minutos con América. Tanto en Liga MX como en Concachampions ha respondido, pero es consciente que le debe mucho al equipo azulcrema.
«Yo la verdad que trabajé de la misma manera. Estuve alejado de todo lo que se dijo de que me iba o me quedaba, me enfocaba en trabajar. Dios sabe cómo hace sus cosas, lo mejor era quedarme. Estoy contento porque el trabajo que he hecho da sus frutos. Estoy en deuda por todo lo que ha pasado y mi meta es seguir. Espero sea un punto de partida para mí», expresó en conferencia de prensa.
El 2021 ha sido difícil para el dorsal 14 de los Millonetas. Una lesión lo alejó por más de siete meses de las canchas, incluso su nombre sonó más por temas ajenos al futbol debido a que fue captado en una fiesta en plena pandemia.
«Hice cosas extrafutbolísticas, pero nunca dudé que puedo darle mucho a la institución. Le agradezco a Dios, mi familia, al club, mis compañeros. La clave es nunca caerme, nunca rendirme, es lindo poder superar las dificultades, dar un poco más. Físicamente me siento bien y mentalmente mejorando. Quiero que sea la pauta para seguir mejorando y ayudar al equipo», afirmó el sudamericano.
Benedetti no cabe de la emoción. Con su aporte ofensivo ha ayudado a cumplir con las metas dentro de la institución. «La felicidad es máxima. Cuando empezó el torneo nos pusimos objetivos, Concacaf y Liga, los dos torneos. Vamos bien, paso a paso, ahora nos toca esta Final, queremos disfrutarla, darle la alegría a la afición, pero paso a paso. Nos vamos contentos de acá y a trabajar de la misma forma, el equipo está muy unido y con ganas de salir adelante», finalizó