El Universal
CIUDAD DE MÉXICO
El voto electrónico no podría implementarse en su totalidad en las elecciones de 2024, ya que debe ser un proceso paulatino que requiere una inversión entre 4 mil millones a 11 mil millones de pesos tan solo en urnas, así como cambios a la legislación, señalaron consejeras del Instituto Nacional Electoral (INE).
En entrevista con EL UNIVERSAL, las consejeras Dania Ravel y Carla Humphrey coincidieron en que las principales ventajas son rapidez, certeza y transparencia en los resultados, así como reducción de costos.
Al respecto, la consejera Dania Ravel, sostuvo que tiene que ser un proceso paulatino, como en el caso de Brasil, en el que hubo 22 años de transición digital.
"La experiencia brasileña nos enseña que este paso no es inmediato, además de que requiere un gran acuerdo político y social para llevarse a cabo. El primer paso es una adecuada regulación legal de este tipo de votación", sostuvo.
En el caso de México, recordó que el INE ha emitido acuerdos para el uso de estas urnas, los cuales han sido confirmados por el Tribunal Electoral. Sin embargo, carecen de una regulación en la ley.
"La última implementación que hicimos fue en el marco de las pasadas elecciones locales, específicamente en Aguascalientes y Tamaulipas, donde se usaron 100 urnas electrónicas", expuso.
Por separado, la consejera Carla Humprhey coincidió en que se deben implementar cambios legales para poder avanzar con este modelo, a pesar de que tienen sentencias del TEPJF a su favor, así como legislaciones a nivel local que han hecho lo propio.
"Claro que tiene que ser un procedimiento pausado. No podemos de aquí al 24 ya usar solo urnas electrónicas en la votación", apuntó.
Sin embargo, señaló que hay "resistencias" dentro del INE para avanzar con su implementación, ya que solo se ha aprobado para ciertas entidades federativas y de forma limitada.
A su vez, recordó que este es un proceso que las instituciones electorales tienen 17 años de experiencia con estas urnas en nueve entidades federativas, mientras que en otras han abierto concursos a la academia para desarrollar un modelo.