El Universal
CIUDAD DE MÉXICO
México cerrará 2022 con una crisis de desaparecidos que alcanza un acumulado de 108 mil personas de las que se desconoce su paradero desde hace décadas. Existen, además, 52 mil personas fallecidas sin identificar, así como el registro de al menos 4 mil fosas clandestinas.
El pasado 2 de diciembre, EL UNIVERSAL informó que a pesar de ser un compromiso con los familiares de las víctimas de desaparición en México, no se ha publicado el Programa Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas y No Localizadas.
Tampoco se tiene información sobre si ya se han creado o publicado instrumentos como el Registro Nacional de Fosas Clandestinas y Comunes y el Registro de Personas Fallecidas No Identificadas e Identificadas No Reclamadas, a cargo de la Fiscalía General de la República (FGR), pese a ser una obligación legal.
Para la titular de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB, Karla Quintana Osuna, la desaparición de personas en México está ligada con la impunidad en 99% de los casos.
La funcionaria reconoce que hay un acumulado de 108 mil casos de desaparición desde 1964, pero que este delito tuvo un incremento sustancial en el año 2007; es decir, con el inicio de la llamada guerra contra el narco, situación que la comisión a su cargo busca revertir a través de la creación de instituciones como el nuevo Centro Nacional de Búsqueda, la existencia de protocolos nacionales, así como la coordinación entre las autoridades federales y estatales ante esta crisis que vive el país.
Asegura que existe coordinación entre las dependencias del Estado mexicano encargadas del tema de las desapariciones, así como con las fiscalías y centros forenses estatales para trabajar, no sólo en la localización de las 108 mil personas desaparecidas, sino también para lograr la identificación de 52 mil cuerpos.